El año 2016 está en su recta final y poco a poco los imputados en los casos de alto perfil han logrado cambios de medida cautelar y gozan en casa de sus fortunas. Casi todos aducen malestares de salud.
Las fiscalías aplicaron detenciones preventivas, pero los abogados recurrieron a las fianzas y allí han logrado lo que han querido.
¿Valió el dinero, el pago a un buen abogado o la justicia no quiere hacer su trabajo? Estas son interrogantes sin respuestas todavía.
En el último caso de cambio de medida cautelar resultó beneficiado Guillermo Ferrufino. Tuvo preso un año y seis meses.
Entre otros afortunados se puede mencionar a Lucy Molinar, exministra de Educación, quien nunca pisó la cárcel pese a las tres investigaciones.
Contrario a la suerte de la exministra está Rafael Guardia Jaén, exjefe del antiguo Programa de Ayuda Nacional (PAN), quien lleva ya dos años detenido luego de su confesión; Óscar Osorio, exministro de Desarrollo Agropecuario, se encuentra detenido desde mayo de 2015; Eduardo Jaén, exjefe de la Autoridad de Innovación Gubernamental, tiene medida de detención provisional, pero actualmente está hospitalizado.
El principal fugitivo
Pero el principal fugitivo es el expresidente Ricardo Martinelli, quien se fue del país el 28 de enero de 2015 a refugiarse a Estados Unidos y enfrenta siete procesos en la Corte.
En tanto, Roberto Pérez, Ricki Calvo y Adolfo 'Chichi' De Obarrio siguen huyendo.
Tania Sterling, fiscal Anticorrupción en el área de descarga, manifestó que el 90 % de los casos de alto perfil están en los tribunales a espera de las fechas y reprogramación de audiencias.
La nota con detalle en nuestra edición impresa de este domingo.
Carolina Sánchez P.