Cuando transite por cualquier carretera, barrio o pueblo, observe cuántos perros, gatos y otros animales deambulan enfermos o con lesiones. Estas situaciones no escaparon a la mirada de Mauren Portilla Ulloa, una costarricense que por años reside en Chiriquí.
'Desde pequeña me he sentido atraída por los animales y más aún en situaciones de abandono y maltrato. Sé que me ha inspirado Papá Dios. Los auxilio igual que lo hago con personas que lo necesitan', afirma Mauren.
Hace varios años empezó a rescatar perros y gatos abandonados. 'Fueron tantos que le pedí a Dios que me iluminara en cómo darle el cuido requerido. Él respondió estableciendo una fundación, e incluso me inspiró en proponer el nombre de Ángeles con Colita', indica.
Ya tiene dos años de haberse iniciado en esa dura tarea, ya que llegan enfermos, llenos de garrapatas y algunos con lesiones de consideración.
No podemos pensar que por ser animales no sufren. Tienen sentimientos y saben expresarlos moviendo sus colitas, orejas. Un gato roza suavemente su cuerpo con tus piernas. Todos muestran cariño e igual temor, rabia o estar a la defensiva', añadió.
Hace unas semanas rescató seis cachorros abandonados, cuando intentaba acariciarlos respondían tratando de morderla. 'Estaban traumados. Sé que tenían que ser por el trato recibido de seres humanos', dijo. De esta manera, detalló que solo debemos tener las mascotas a las que podamos brindarles las comodidades necesarias.
Por: Eduardo E. Espinosa
