Cada año, desde que llega diciembre, la alegría de la Navidad empieza a manifestarse en una de las históricas calles del distrito de La Chorrera, la Calle del Agua.
Los arcos con luces, las casas adornadas y los foquitos que se ubican estratégicamente en toda la calle anuncian la alegría por la llegada del Niño Dios.
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INICIOS
La tradición se inició hace más de dos décadas, con la intención de resaltar el valor de la familia y los buenos principios.
Este enfoque de la Navidad fue bien recibido por los moradores, quienes participan activamente hasta el 6 de enero, fecha en que culmina este escenario de luces.
Durante estos días, los niños son los principales protagonistas de las veladas nocturnas. Es normal que dentro del bullicio nunca falten los flashes de algún padre de familia.
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Algunos comerciantes aprovechan para vender ya sea su carne en palito, accesorios navideños, helados, hot dog, entre otros productos, lo que hace que el ambiente cobre un aspecto ferial.
Adelaida Ayala, una de las organizadoras de esta actividad, manifestó que durante todos estos días habrá presentaciones folclóricas de distintos colegios de la provincia y la única música que se resaltará son los villancicos.
La seguridad se mantendrá con el acompañamiento de las unidades policiales.
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Datos
Para embellecer la calle, la comunidad se une con un solo fin.
Alrededor de 9 mil dólares deben invertir cada año.
El aporte mayoritario depende de las actividades que realizan.
Otro pequeño aporte es de la alcaldía y el representante de la comunidad.
Algunos miembros de la comunidad dan aportes directos.
Nota: Alicia Valdés
Mi Diario