El presidente de Bolivia, Evo Morales, llamó hoy 'delincuente confeso' al periodista de la cadena CNN Fernando del Rincón e insistió en que cometió un delito cuando entrevistó a un niño con el que se intentó suplantar a un supuesto hijo del gobernante, aunque ese material no se difundió.
'El periodista @soyfdelrincon sabía que no existía el niño. ¿Por qué no lo denunció en su momento? Como no denunció es un delincuente confeso', dijo Morales en su cuenta de twitter @evoespueblo.
El presentador de TV @soyfdelrincon de @CNNEE nunca solicitó una entrevista conmigo, ni de manera verbal ni de manera oficial.
— Evo Morales Ayma (@evoespueblo) 2 de julio de 2016
Si #CNN no respeta la verdad ante un Presidente y ante un país de América Latina, significa que CNN no tiene ética. @CNN le miente al mundo.
— Evo Morales Ayma (@evoespueblo) 2 de julio de 2016
Pregunten a @soyfdelrincon de @CNNEE quiénes lo contactaron para sumarse al #GolpeMediático y político en Bolivia.
— Evo Morales Ayma (@evoespueblo) 2 de julio de 2016
El periodista @soyfdelrincon sabía que no existía el niño. ¿Por qué no lo denunció en su momento? Como no denunció es un delincuente confeso
— Evo Morales Ayma (@evoespueblo) 3 de julio de 2016
Como @soyfdelrincon no denunció, cometió delito de trata y tráfico de personas y violó Ley de la niñez con cárcel de 5 a 10 años en #Bolivia
— Evo Morales Ayma (@evoespueblo) 3 de julio de 2016
.@soyfdelrincon es coautor de apología pública de un delito, asociación delictuosa, encubrimiento y complicidad. @CNN no debe encubrirlo.
— Evo Morales Ayma (@evoespueblo) 3 de julio de 2016
En otro tuit, agregó que el informador, de nacionalidad mexicana, al no haber comunicado el supuesto descubrimiento de la suplantación 'cometió delito de trata y tráfico de personas y violó la ley de la niñez, con cárcel de 5 a 10 años en #Bolivia'.
Morales considera que Del Rincón y CNN fueron parte de una supuesta conspiración e intento de 'golpe mediático-político' porque no informaron de la falsedad montada con ese niño, un tema que ha afectado la imagen del mandatario desde febrero pasado.
El periodista de CNN rechazó hace unos días las acusaciones de conspiración contra Morales y alegó que en su investigación sobre el supuesto hijo del mandatario no encontró los elementos suficientes ni evidencias 'para descartar o confirmar la existencia' del menor.
'En un acto responsable, ético, vertical y profesional, totalmente contrario a una conspiración, la decisión fue no transmitir los elementos de la misma (la investigación)', dijo el comunicador en un mensaje difundido por la web de su canal.
No obstante, el Fiscal General, Ramiro Guerrero, anunció que convocará a declarar a Del Rincón, que vive en Estados Unidos, y expresó su deseo de que el informador tenga 'la voluntad de cooperar en el esclarecimiento de los hechos'.
Según Morales, los delitos supuestamente cometidos por la cadena CNN y el periodista son apología pública de un delito, asociación delictiva, encubrimiento, complicidad y trata y tráfico de personas.
A pesar de que la entrevista al menor nunca se emitió, Morales acusa a CNN de no desmentir la existencia de su supuesto hijo.
La suplantación, según las autoridades bolivianas, fue organizada por la expareja del mandatario, Gabriela Zapata, que está en prisión, y tres abogados, uno de los cuales también está detenido, mientras que los otros dos supuestamente se fugaron a Perú.
Tras haber informado durante varios meses que el hijo que tuvo con Morales en 2007 estaba con vida, Zapata terminó admitiendo hace poco que el niño no existía y dijo a las autoridades que el menor falleció en 2009, aunque no hay un certificado de defunción.
El mandatario ha defendido que él siempre dijo la verdad cuando informó de la muerte del menor tras haber nacido, si bien durante la controversia algunas autoridades incurrieron en contradicciones sobre la existencia del pequeño e incluso sobre su nacimiento.
El ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana, afirmó hoy en medios estatales que CNN se sumó al 'cartel de la mentira', como llama a los medios bolivianos que trataron como noticia el caso.
Organizaciones nacionales e internacionales de prensa defendieron a los medios bolivianos acusados y pidieron que las acusaciones se traten en el marco de la Ley de Imprenta y no en normas penales.