Las decisiones de los jueces del país siguen estando en la mira, sobre todo en estos momentos en que el país afronta una ola delictiva de atracos, homicidios y tráfico de drogas, entre otros.

El más reciente acontecimiento lo protagonizó el Tribunal de Apelaciones, integrado por Francisco Carpintero, Carolina Santamaría y Luis Mario Carrasco, que variaron la decisión de un juez de garantías en Colón para favorecer a un ciudadano colombiano, de tres que fueron aprehendidos hace cinco meses en María Chiquita, provincia de Colón, cuando llevaban en un pick up 122 kilos de droga, específicamente cocaína negra.
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En la acción ejecutada el 19 de abril, participaron unidades de la Policía Nacional y del Ministerio Público, y allí fueron aprehendidos con la droga Carlos Andrés Calderón Arboleda, con pasaporte AR-358072; Jhon Jairo Gómez Henao, con pasaporte AT912146 y cédula E-8-151399 y Johan Sebastian Gómez Henao, con pasaporte AQ260771, RN2479205 y cédula E-8-115784.
Johan Sebastian fue el favorecido con el cambio de medida cautelar de detención a impedimento de salida del país. Además, debe pagar una fianza de 10 mil dólares.
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El Ministerio Público puso de manifiesto esta decisión y explicó que la mercancía decomisada está valorada en el mercado en 5 millones de dólares, eso sin contar con los serios problemas de seguridad pública y de salud que genera en la población panameña.

A quien tampoco le hizo gracia la medida adoptada por el Tribunal de Apelaciones fue al ministro de Seguridad, Rolando Mirones, quien en su cuenta de Twitter la calificó de “lamentable” y que “este tipo de personas regrese a la calle con una fianza de 10 mil dólares”.