Los fiscales superiores Zuleyka Moore y Adecio Mojica, reconocidos por su labor en casos anticorrupción, han sido destituidos de sus cargos por el procurador general de la Nación, Javier Caraballo.
Ambos fiscales formaron parte del equipo que investigó las coimas que Odebrecht repartió en Panamá, y Moore también lideró la instrucción del expediente por presunto peculado en la compra de nueve radares a la empresa italiana Selex, donde se vinculó al exministro de Seguridad Pública, José Raúl Mulino, próximo a asumir la presidencia de la República.
Fuentes del Ministerio Público confirmaron que la destitución de Moore y Mojica se debió a que no eran funcionarios de carrera. Mojica, quien se desempeñaba como fiscal de Atención Primaria de Chiriquí, confirmó su salida.

Por su parte, Moore estaba asignada a la Fiscalía Regional de Bocas del Toro en el momento de su destitución.
Mojica y Moore, junto con otros fiscales anticorrupción, fueron apartados temporalmente debido a una denuncia presentada por Lucy Molinar, quien será ministra de Educación en el nuevo gobierno de Mulino.
Aunque fueron reincorporados a sus funciones en abril de 2022, solo Ruth Morcillo regresó a la Fiscalía Especial Anticorrupción del caso Odebrecht, mientras los demás fueron redistribuidos a diferentes fiscalías.
Durante su tiempo como fiscales anticorrupción, Moore y Mojica lideraron investigaciones cruciales relacionadas con delitos contra la administración pública.
Moore, en particular, estuvo a cargo de la investigación de las coimas de Odebrecht, en la que se encuentran imputados los expresidentes Ricardo Martinelli y Juan Carlos Varela, así como los hijos de Martinelli y otros exfuncionarios de su gobierno.
Moore también fue postulada por Varela como magistrada de la Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia, aunque la Asamblea Nacional no ratificó su nombramiento.
Mojica, con 17 meses en el cargo de fiscal anticorrupción, colaboró en estas investigaciones y participó en juicios de alto perfil, incluyendo el proceso seguido a 32 personas por presunto peculado en perjuicio del Fondo de Equidad para la Calidad de la Educación (FECE).
Las destituciones de Moore y Mojica generan interrogantes sobre el futuro de las investigaciones anticorrupción en Panamá, especialmente en un momento crítico con la transición de mando presidencial.