Eybar Scott Aguilar St. Rose cometió uno de los 93 homicidios que se registraron en la provincia de Panamá Oeste durante el año 2020.
La magnitud del atroz crimen de Hernán Darinel Ábrego De Gracia, de 14 años de edad, hizo que se convirtiera en uno de los más despiadados de ese año por la forma en que Eybar Aguilar lo hizo y luego quiso deshacerse del cuerpo del adolescente.
La noticia dio la vuelta al país. Se explicaba la forma en la que fue ubicado el cuerpo sin vida del adolescente el 8 de febrero del 2020 en una quebrada próxima a su residencia en la barriada Villa del Carmen, en el distrito de La Chorrera.
Al cumplirse dos meses de que un jurado de conciencia, conformado por 5 mujeres y 3 hombres, declaró culpable a Eybar Scott Aguilar St. Rose y que el Tribunal de Juicio lo condenara a 30 años de prisión, la fiscal Superior Sherly Barría, de la Fiscalía de Homicidio y Femicidio de la provincia de Panamá Oeste, nos habló de quién era Eybar y cómo se logró dar con su vinculación en este salvaje crimen.
Periodo de Investigación
La fiscal Barría dijo que desde un principio la investigación no fue fácil, pues por la forma en que fue ubicado el cuerpo de Hernán (en estado de descomposición) se perdieron muchos elementos, haciendo más complejas las investigaciones.
También porque Eybar trató de borrar todas las evidencias en la escena del crimen. Luego de mutilar el cuerpo de Hernán (del ombligo hacia abajo), el homicida utilizó dos sacos para introducir ambas secciones y después intentó hundirlos en la quebrada para que el cuerpo no fuera encontrado.
El 31 de julio del 2020, las evidencias daban cuenta de que la única persona que le había causado la muerte y que estaba vinculada a este atroz homicidio era Eybar Scott Aguilar St. Rose, de 19 años de edad.
Lo aprehendieron en una residencia de la pareja de su mamá ubicada en la barriada Nicolás A. Solano, en el distrito de La Chorrera, junto al resto de sus familiares, explicó la fiscal Barría.
¿Quién es Eybar ?
Eybar tenía 19 años cuando asesinó a Hernán. Su niñez y juventud las pasó en la barriada Villa del Carmen, a pocos metros de la casa de Hernán. Ambos jóvenes estudiaron en la misma escuela. Eybar llegó a graduarse de sexto año.
Eybar no trabajaba, no estudiaba y según testimonios de los residentes de la barriada, se dedicaba a consumir sustancias ilícitas y no era bien visto en la comunidad, manifestó la fiscal Barría.
Pruebas contundentes
En las primeras diligencias entrevistaron de 4 a 5 personas, entre ellas estaba Eybar. Los investigadores conversaron con él y con mente fría aceptó que conocía a Hernán por ser vecinos, pero que no tenía conocimiento del hecho.
Las investigaciones fueron apuntando cada vez más hacia él; Eybar vivía frente a la quebrada donde quiso deshacerse del cuerpo y luego de los hechos toda su familia se mudó sorpresivamente.
A través de intervenciones telefónicas debidamente autorizadas, los investigadores lograron escuchar cómo Eybar preparaba a sus amistades sobre qué decir ante el Ministerio Público por si preguntaban por él.
En otra de las intervenciones telefónicas Eybar, de manera burlesca, le confesó a un primo que él era la persona que había asesinado a Hernán, que lo había hecho en 10 minutos y que fue todo rápido. También que lo había hecho porque Hernán era un “sapo” y que no había dejado pruebas, ya que recogió hasta las hojas que estaban manchadas de sangre.
Las autoridades lograron acreditar su voz y línea telefónica, siendo leído y escuchado por el jurado de conciencia y Tribunal de Juicio, explicó la fiscal Barría.
Aunado a las intercepciones, por cosas del destino, la mamá de Hernán, la señora Denis De Gracia, reinstaló la aplicación de Instagram en su celular y al abrirla inmediatamente salió la cuenta de Hernán, que al parecer nunca cerró y en los mensajes estaba la conversación que Eybar sostuvo con el adolescente en la que lo cita en la quebrada donde dos días después fue ubicado muerto por un residente.
Nunca se arrepintió
Eybar la única vez que habló fue en el audiencia de apelación, donde le dijo al Tribunal de Juicio que tomaran en cuenta que era joven y que quería estudiar y que le dieran una oportunidad.
Hoy día Eybar está en el centro penitenciario La Gran Joya, lugar de donde debe salir a los 52 años.
Caja de datos
Hernán era el menor de tres hermanos:
Eybar le propinó 9 heridas con arma blanca y luego lo estranguló con un cable.
El arma para herir y desmembrar a Hernán nunca se pudo recuperar. Dentro de uno de los sacos se encontró un cuchillo, pero no era el que utilizó para cometer este crimen.