En medio del debate que se mantiene entre los transportistas selectivos y de turismo que exigen la suspensión definitiva de la operación de las plataformas tecnológicas de transporte como Uber.
Hay quienes cuestionan el que aún no se logro fiscalizar quienes utilizan los taxis para delinquir.
Y es que cada vez es más frecuentes que dicho transporte selectivo sea utilizado por delincuentes para robos, sicariatos y hasta violaciones sin tener la certeza de quién está detrás del volante.
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El último de estos hechos ocurrió a las 5:45 a.m. de este martes, según una fuente policial cuando el santeño Jacinto González, caminaba por el sector de Pan de Azúcar, corregimiento de Amelia Denis, distrito de San Miguelito, fue interceptado por dos sujetos en un taxi quienes lo amenazaron con un arma de fuego para despojarlo de su billetera en la que mantenía documentos personales y 35 dólares, además de una sortija valorada en 200 dólares y las llaves de su casa.
Una vez lo despojaron de sus bienes, escaparon en el taxi el cual no logro observar la placa y fue entonces que el afectado ubicó cerca de los terrenos de la escuela República de Italia a las unidades de la policía a quienes les relató que fue víctima de un robo.
