El 14 de diciembre de 2023, la tranquilidad de Bugaba, Chiriquí, fue rota por una revelación tan bizarra como escalofriante: en lugar del cuerpo sin vida de una bebé, la familia paterna descubrió una muñeca dentro del féretro. Este insólito hallazgo desató un escándalo nacional que culminará en el juicio de Tahira Edilka Montero, señalada como la mente detrás de esta farsa macabra.
Montero, de 36 años, enfrentará la justicia el 19 de noviembre de 2025, tras ser imputada por simulación de hechos punibles y falsificación de documentos. La audiencia fue confirmada por la jueza de garantías Saida Romero, quien aprobó 53 pruebas en una audiencia intermedia.
Un funeral que se volvió pesadilla
Todo comenzó cuando la familia paterna, liderada por Ducdiel Morales, de 26 años, abrió el ataúd para despedirse de la bebé supuestamente llamada Ducdielys Milagros Morales Montero. Lo que encontraron fue una muñeca. “Fue como una bofetada en la cara; no lo podíamos creer,” expresó un familiar entre lágrimas.
La madre alegó inicialmente que la bebé había nacido en octubre de 2023 en el Hospital Santo Tomás y fallecido días después. Sin embargo, las investigaciones revelaron que ni el nacimiento ni la defunción ocurrieron, y que los documentos proporcionados eran completamente falsos.
Una farsa teatral y las pistas del engaño
Entre las pruebas admitidas figuran documentos falsificados, testimonios de familiares y peritajes. También se confirmó que Montero, quien decía estar embarazada, habría usado imágenes y videos de otra mujer para convencer a Morales de la existencia de la niña.
Además, el certificado de defunción estaba a nombre de otra persona, y el médico señalado negó haber atendido a Montero.
El juicio que el país espera
El Ministerio Público pide 132 meses de prisión para Montero y un resarcimiento económico de $25,000 por los daños causados. Mientras tanto, la Fiscalía Anticorrupción sigue investigando cómo Montero logró falsificar documentos en una trama que involucró a múltiples instituciones públicas.
“Esto no es solo un engaño a una familia; es un golpe a la confianza en el sistema. Este caso muestra lo lejos que alguien puede llegar para sostener una mentira,” afirmó un analista legal.
El juicio promete revelar los detalles más oscuros de este caso, que ha dejado al país dividido entre la indignación y la incredulidad.