Luego del hallazgo de una fosa clandestina en donde fueron encontrados siete cadáveres de seis menores de edad y una mujer embarazada, en El Terrón, Santa Catalina, comarca Ngäbe Buglé, este crimen se vinculó a una organización supuestamente religiosa y la investigación se elevó a causa compleja.
Esto le permitió al Ministerio Público, a través de la Sección de Homicidio y Femicidio, de la Fiscalía Regional de Bocas del Toro, continuar con las investigaciones iniciadas desde enero de 2020, por lo que informó de la realización de diligencias judiciales y la recopilación de una serie de pruebas y testimonios que se llevaron a cabo en el lugar en donde ocurrieron los hechos.
Fue así que se logró la imputación de cargos de nueve personas, 8 hombres y una mujer, residentes de El Terrón, todos de una misma familia, supuestamente miembros de una secta o agrupación denominada por ellos “Iglesia de Dios”, que funcionaba en el área.
El Ministerio Público informó este martes, 27 de abril, que han culminado la etapa de investigación de este caso, por lo que emitió el escrito de acusación al Órgano Judicial.
El Fiscal Juvencio Caballero Solé indicó que en la carpeta se incluyeron las pruebas testimoniales, periciales, materiales y documentales presentadas por el Ministerio Público, las cuales deberán ser debatidas en una audiencia intermedia, a fin de ser admitidas para la celebración de un juicio oral.
De acuerda al informe, “las nueve personas están imputadas por la presunta comisión de los delitos de homicidio agravado, femicidio y privación de libertad”.
Los siete cadáveres encontrados pertenecían a seis menores de edad con edades de entre 1 a 17 años y una adulta en estado de gravidez, todos fueron torturados hasta su muerte, acusados supuestamente de ‘pecadores’.
A los imputados se les practicaron exámenes psiquiátricos.
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