La larga espera de los vehículos para pasar hacia la costa abajo de Colón con la ayuda de dos ferris será cosa del pasado a partir de este viernes 2 de agosto, cuando se inaugure el tercer puente sobre el Canal de Panamá.
Esta nueva obra arquitectónica rompe otro récord para Panamá y hasta para el mundo, ya que es el puente atirantado de concreto a cuatro carriles con la luz más larga del mundo (distancia, en proyección horizontal, entre los apoyos de una viga o puente), con 530 metros.
Su construcción empezó a ejecutarse en mayo del 2013, aunque debió iniciarse apenas se inauguraba el tercer juego de esclusas, el 26 de junio de 2016, tal como lo estipulaba la Ley 28 de 2006 que aprobó la ampliación del Canal.
CRECE LA ESPERANZA
Esta estructura en el Atlántico, que tiene 4 mil 605 metros de carretera, beneficiará a cuatro distritos: Chagres, Donoso, Omar Torrijos Herrera y Colón, con un total de 14 corregimientos, 495 comunidades y más de 40 mil habitantes.
Cristino Coronado, morador de Quebrada León, en Icacal Adentro, distrito de Chagres, dijo estar feliz por este nuevo acontecimiento.
“Para nosotros será más rápido viajar, ya que por ferri es muy lento”, dice, pues se tiene que esperar hasta una hora para que le toque el turno de subirse al barco, que puede transportar más de 20 carros.
Las horas pico son en la mañana y en la tarde, debido a la afluencia de quienes laboran en las ciudades de Colón y Panamá.
Sin embargo, añadió que la carretera no está muy buena, pues hay muchos huecos. “En el lugar a donde voy la carretera está muy mala y debemos usar carros 4x4”, indicó.
Por su parte, Darinel Domínguez, alcalde de Chagres, es de la idea de que esta obra será de gran beneficio para los pobladores, pues aumentará el turismo, pero al mismo tiempo habrá un nuevo desafío en cuanto a seguridad, por lo que se tiene que ajustar la cantidad de policías.
¿Y QUÉ PASARÁ CON EL FERRI?
El sistema de ferri, que funciona desde hace unos 10 años de manera fluida, dejará de operar.
Los dos barcos que actualmente están viajando, la “Náutica JJ” y “5 de Noviembre”, son manejados por la empresa contratista Náutica JJ desde hace tres años.
Funcionan las 24 horas con cuatro marinos, un capitán, un seguridad de la Autoridad del Canal de Panamá, con el apoyo de varios agentes del Servicio Nacional Aeronaval para cualquier situación mayor.
Los marinos, quienes no se identificaron por no estar autorizados para declarar, se encontraban un poco inquietos por su situación laboral. “Nos iremos para la casa”, dice uno, entre risas.
Pero aun así, se sienten orgullosos de haber transportado a miles de personas y hasta se sienten importantes, ya que estuvieron trabajando en una parte de la historia de Panamá que concluye, pero se inicia una nueva etapa para el bien de los pobladores de la costa abajo de Colón.
CURIOSIDADES SOBRE ESTA ETAPA QUE FINALIZA
El 10 de octubre de 1913 se voló el último dique que dividiría a Panamá.
El presidente de EU, Woodrow Wilson, oprimió el botón desde Washington y se transmitió por telégrafo.
Desde 1954, los moradores también cruzaron por un puente giratorio de las esclusas de Gatún.
Fotos: Gabriel Rodríguez
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