La “voz oficial” de las víctimas o afectados por el envenenamiento masivo por dietilenglicol ante la Comisión de Seguimiento, organismo adscrita al Ministerio de Salud (Minsa), será electa este miércoles a través de un proceso de votación que supervisará la Defensoría del Pueblo.
Para este importante ejercicio, que tiene como fin unificar a los distintos grupos que a nivel nacional luchan y defienden los derechos de los miles de afectados por el tóxico, la Defensoría ha habilitado toda una metodología para facilitar el sufragio. Está incluye el voto electrónico para que quienes estando inscritos en el padrón electoral verificado hayan decidido emitir su decisión vía digital, recibieron un correo electrónico siete (7) días antes de la fecha de la elección y otro reiterativo 24 horas antes con el enlace y un código secreto para ejercer su voto a partir de las 8:00 a.m. de este miércoles 16 de noviembre.
Para los que realicen su sufragio en persona, las mesas de votación estarán ubicadas en la sede principal ubicada en la ciudad capital y en las 14 Regionales de la Defensoría del Pueblo a nivel nacional, en horario de 8:00 a.m. a 2:00 p.m.
Eduardo Leblanc, jefe de la Institución panameña de Derechos Humanos, consideró que el ejercicio permitirá que a través del representante de las víctimas o afectados la voz de ellos se articule con los demás integrantes de la Comisión de Seguimiento.
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Se informó que la certificación de los resultados, una vez escrutados los votos, será entregada al Minsa y posteriormente la Defensoría del Pueblo proclamará a la nómina ganadora, conformada por un principal y su suplente.
La resolución N° DDPP-002-2022 del 26 de mayo del 2022 aprobó el calendario y el reglamento a emplear en la elección de las víctimas por intoxicación masiva con dietilenglicol y de sus familiares, adscrita al Ministerio de Salud. La misma fue publicada en Gaceta Oficial N° 29557 del 15 de junio del 2022.
El Centro Especializado de Toxicología del Minsa sigue en la evaluación de expedientes para determinar si las personas son víctimas del dietilenglicol, que ingirieron a través de un jarabe para la tos que suministró la Caja de Seguro Social (CSS). Considerada una de las principales crisis sanitarias del país y una de las más grandes de su tipo en todo el mundo, el envenenamiento masivo se detectó en el mes de octubre del año 2006.
De momento, medio centenar de expedientes han sido plenamente certificados. Más de mil siguen en espera de diagnóstico.