En el marco de un foro internacional con enfoque de género y derechos humanos, la titular del Ministerio de Desarrollo Social (Mides), María Inés Castillo, se comprometió con que antes de que culmine el presente año el país debe aprobar la estrategia nacional de prevención y atención del embarazo adolescente.
Ello es impostergable si tomamos en cuenta que solo en el 2020, y de acuerdo con cifras del Ministerio de Salud (Minsa), Panamá registró casi 10 embarazos de niñas y adolescentes, de un total de 36 mil partos que se dieron en medio de la pandemia.
El que casi un tercio de los embarazos sean de menores de edad nos envía el mensaje de que muchas cosas se están haciendo mal, de allí la importancia del mensaje de la funcionaria del Mides.
Para contar con un marco de iniciativas que nos ayuden a revertir estas cifras vergonzosas, es vital incorporar a la sociedad en la discusión y garantizar los consensos que eviten que, como en otras ocasiones, el tema sea congelado por posiciones radicales o fundamentalistas.