En medio de lo que parecía un cuento de hadas profesional, el 13 de abril de 2021, la abogada Odila Castillo se vio atrapada en un torbellino de controversias tras un “incidente” que estalló en redes sociales como pólvora. Ella, por supuesto, se defendió con uñas y dientes, negando cualquier participación en el escándalo.
¿Sin Rastro?
Era una abogada contratada por servicios profesionales en la Contraloría General de la República, y para salvar su imagen, las más altas autoridades intervinieron: el contralor Gerardo Solís, el entonces ministro de Seguridad Pública, Juan Manuel Pino, y el exdirector de la Policía Nacional. , Gabriel Medina. Pero, curiosamente, toda mención de Castillo desapareció de las redes sociales de la Contraloría, como si nunca hubiera existido, a pesar de un jugoso contrato de $31,500 como asesora jurídica externa.
La Jugada Maestra
El 21 de abril de 2021, el ministro Pino lanzó un salvavidas, asegurando que no había investigaciones en curso sobre Castillo. Sin embargo, el destino tenía otros aviones. Desde junio de 2021, Castillo encontró refugio en la Autoridad Marítima de Panamá (AMP), donde su carrera no solo continuó, sino que despegó a toda velocidad.
Ascenso Estelar
El bufete en el que compartía socios con Zenia Vásquez, secretaria general de la Contraloría, experimentó un despegue meteórico en 2021: de $20,000 en ingresos a la impresionante cifra de $742,000. No está mal, sobre todo en un año en que la pandemia aún hacía estragos y la economía luchaba por recuperarse. Castillo, en un giro irónico, reportó ingresos personales cercanos a $400,000 y se compró un lujoso vehículo de $77,000. Pero esto era solo la punta del iceberg.
Compras Lucrativas
El verdadero festín llegó en 2022. Con ingresos personales que rozaban el millón, Castillo se lanzó a la compra de propiedades de ensueño. Un penthouse en Santa María Court, valorado en más de $1 millón, fue solo el comienzo.
La sociedad Inversiones SMC 114A, creada para gestionar su nueva adquisición, incluyó a su sobrina, Kristel Cousins, ya su socia Judith Guardia en la junta directiva. ¿Cuántas sorpresas más esconderá esta trama?
Más Allá de lo Evidente
Pero las compras no se detuvieron ahí. Castillo también estaba en vías de adquirir un apartamento en las playas de Buenaventura, en una sociedad que incluía su socia, un hecho que despertó el interés de muchos. Los rumoresban que estaba usando el lugar como una especie de refugio familiar, aunque los vecinos comentaban sobre sus visitas regulares.
La Boutique que Sorprende
La cereza del pastel fue la apertura de su boutique, Red Design, en un local del Federal Mall de Chiriquí, cuyo costo superó los $400,000. Al parecer, Castillo intentó obtener un préstamo para financiarlo, respaldado por su propia firma, cuyos activos eran asombrosos: ¡$8.1 millones! Sin embargo, la transacción no se concretó y, en un movimiento audaz, se prestó a sí misma un nuevo dinero para el local comercial.
Un Laberinto de Negocios
Mientras la abogada cultivaba su fortuna, su éxito atrajo la atención de colegas que se preguntaban cómo había alcanzado tal meteoricidad en tan poco tiempo. El bufete, ahora renombrado como Castillo, Guardia & Asociados, se alza como símbolo de una ambición sin límites, dejando atrás el anterior nombre de Palacios, Vásquez y Asociados.
¿Y las Respuestas?
Cuando La Prensa la interrogó sobre sus adquisiciones y si estos inmuebles estaban en pago por sus servicios, Castillo guardó silencio. Su vida es un enigma, un laberinto de compras lujosas y negocios que no dejan de intrigar. ¿Qué secretos guarda la abogada detrás de su sonrisa millonaria? Las respuestas parecen estar tan bien guardadas como sus múltiples propiedades.
En la próxima entrega, revelaremos los escandalosos ingresos que Castillo recibió en 2023. ¡No querrás perdértelo!