Tras toda la polémica y el escándalo que surgió por la separación de tres sacerdotes luego de la divulgación de un video que dejó al descubierto la vinculación de uno de estos en un escándalo de tipo sexual, la tarde de este miércoles 2 de octubre, Monseñor José Domingo Ulloa, Arzobispo de Panamá, manifestó durante una conferencia de prensa que se siente agradecido de que todo haya salido a la luz.
“La fe nos ayuda a ver esto que ha salido a la luz como una oportunidad de purificación para que esta parte de la iglesia sea lo que tenga que ser. Los medios de comunicación nos han hecho un bien tremendo”, afirmó.
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Ulloa expresó que en este tipo de procesos la iglesia utiliza el Código de Derecho Canónico, el cual está dividido en siete libros.
“No tengamos miedo al sufrimiento de la iglesia, a veces decimos cosas sin los fundamentos debidos, en este caso se ha suspendido a los hermanos que pertenecían a la Arquidiócesis y se está realizando una investigación canónica”, acotó.
El Arzobispo de Panamá indicó que una vez terminada la investigación se va a enviar a la Congregación de la Santa Doctrina de la Fe y ellos serán los que decidirán qué sanción recibirán los tres sacerdotes separados.
“Se pretende buscar la salvación y reparar el escándalo... Cuando hablamos de moral no solo es la sexual, hay otros abusos que cometemos como el abuso de poder o el económico y eso dentro de la iglesia como fuera de ella también lo tenemos que hacer visible”, aseveró.
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Ulloa señaló que en medio del dolor y la vergüenza, no se pueden quedar “hurgando en la llaga”, por lo que están trabajando en algunas campañas para la prevención de abusos sexuales, ofreciendo talleres en distintas Diócesis para que los padres de familia estén siempre atentos a sus hijos y a las señales de advertencia que estos presenten.
Por su parte, Monseñor Manuel Ochogavía Barahona, obispo de la Diócesis de Colón, Kuna Yala y Secretario general de la CEP, resaltó que el celibato no es la causa de las acciones por parte de los sacerdotes.
“El celibato no es una represión, es saber amar distinto, la intimidad no lo es todo. Estamos viviendo un tiempo de prueba y este no es solo un problema de la Iglesia católica; sino de toda la sociedad y todos tenemos que poner de nuestra parte”, recalcó.
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Ulloa añadió que en los últimos 10 años han separado a casi ocho sacerdotes en Panamá por delitos sexuales, algunos casos con mayores de edad y otros cometidos a menores o contra el sexto mandamiento (‘No cometer actos impuros’).
“Los delitos contra el sexto mandamiento los atienden y los estudian los peritos y abogados canonistas, una vez se determine su culpabilidad, la sentencia se debe dar con nombre y apellido y públicamente”, reveló.
Monseñor José Domingo Ulloa pidió a la población denunciar formalmente si conoce de algún caso de abuso sexual.
“No hay que vivir en doble vida y es algo que nos tenemos que cuestionar todos. Un sacerdote no es un superhombre o un ángel, es simplemente un hombre... La iglesia es de Cristo, a pesar de los pecados de sus miembros, somos una familia, familia de Dios y es por ello que en tiempos de mayor oscuridad el espíritu santo saca la santidad de la gente”, aseveró.