El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, tras cuestionar que la canciller de Panamá, Erika Mouynes, le comunicara que se incomodó con el nombramiento como embajador en suelo canalero de Pedro Salmerón, señalado por presunto acoso sexual, informó que el historiador renunció a la designación de ese cargo en Panamá.
López Obrador reveló que Pedro Salmerón será reemplazado en la designación de embajador en Panamá, por una dama, la senadora suplente Jesusa Rodríguez. “Si Panamá da su beneplácito”, dijo con aparente tono sarcástico.
Pese a la indignación de varios grupos feministas, el mandatario mexicano no le ‘para bolas’ a los señalamientos de acoso y, al contrario, defendió ampliamente los conocimientos de Salmerón, como un “brillante” historiador, lamentando la postura de la canciller panameña.
“Resulta que lo propusimos para embajador en Panamá y, como si fuese la Santa Inquisición, la canciller de Panamá se inconformó... porque no estaban de acuerdo en el ITAM”, dijo.
Y es que el nombramiento había causado revuelo en redes sociales, luego de que estudiantes del Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM) lo señalaran como presunto acosador sexual durante su periodo como profesor.
El mandatario mexicano salió en su defensa argumentando que no había ninguna acusación formal.
“Vamos a presentar una propuesta, a ver si la acepta el Gobierno de Panamá, no creo que el presidente de Panamá esté enterado, yo creo que esto tiene que ver más con la canciller”, afirmó López Obrador, al referirse a su propuesta como nueva embajadora de la senadora suplente Jesusa Rodríguez.
Confirmó que Mouynés le pidió que no enviara la solicitud de beneplácito para el nombramiento del historiador Salmerón.
“Lo lamento muchísimo, porque es la tierra de Omar Torrijos, que le devolvió la soberanía a Panamá. Pero Omar Torrijos pensaba de otra forma”, dijo el presidente mexicano y hasta le recomendó un libro a la canciller panameña.
“Le recomiendo el libro que hizo ese gran escritor norteamericano Graham Greene, ‘Descubriendo a El General’... sobre (el desaparecido) Omar Torrijos, que habla sobre los inquisidores... Se lo recomiendo allí con todo respeto a la canciller”, dijo López Obrador.
El mandatario mexicano reveló entonces que el historiador le envió su carta de renuncia y que se la aceptó, muy comprometido con buscarle otra posición, porque le gustaría que fuera su asesor para aprovechar sus conocimientos.
“Nos mandó una carta Pedro, porque se hizo un escándalo, imagínense si no existe una denuncia formal, nada más por la campaña de linchamiento encabezada por Denise Dresser acusándolo de acoso sexual. Y, sin duda, hay un componente conservador en todo esto, sin duda. Entonces, me envió una carta”, manifestó.
“Al convertirse mi nombramiento en un tema de género y política internacional he creído pertinente señor presidente, hacer como en 2019, si usted cree que lo mejor para México y para el gobierno que usted preside, es que yo dé un paso de costado, pongo a su disposición mi declinación al cargo que me ofreció”, manifestó el historiador en su carta dirigida al presidente mexicano.
Agradeció sus palabras y su defensa. “Su amistad y su confianza son para mí mucho más importantes que cualquier cargo o empleo”, dijo.
“Vamos a buscar la forma, a ver si no se enojan los conservadores, de utilizar los conocimientos de Pedro en otro campo. A mí me gustaría que nos ayudara en lo que son archivos, el archivo agrario y él es especialista. Me gustaría que fuese mi asesor para hacer en Presidencia una historia para los jóvenes sobre los fraudes electorales en México, sería buenísimo, por lo menos 100 años de fraudes. O cualquier otra actividad histórica que él quisiera aceptar”, expresó López Obrador.