El patacón, el reportero y el “cocorrón”. Ahí se ha ido toda la atención por lo ocurrido el pasado sábado en Vista Hermosa.
El ex presidente Ricardo Martinelli presentó una denuncia ante la Fiscalía de Atención Primaria en contra de Mauricio Valenzuela y, de paso intentó coartar la libertad de prensa de Mi Diario, La Prensa, TVN, Radio Panamá y Foco.
En una nota, que envió el vocero Luis Eduardo Camacho, se anunció a este medio que se dictó una medida de protección en favor de Martinelli y su familia, y que la misma impide a Mauricio Valenzuela referirse a ellos a través de los medios de comunicación previamente mencionados.
El Ministerio Público aclaró que solo se ordenaron rondas policiales para proteger la integridad del ex presidente, pero no se ha ordenado ninguna medida contra los medios de comunicación como Mi Diario y otros.
Pero el fondo del problema es el mismo por el que se ha señalado a varios funcionarios en los últimos meses. Quebrantar las medidas sanitarias establecidas por el Ministerio de Salud (Minsa).
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Fotos circularon en las redes sociales donde se observa al ex presidente Martinelli sentado junto a otras tres personas en una sola mesa dentro del restaurante bar La Morena. Están sin mascarillas y sin distanciamiento social dentro de un sitio que todavía debería permanecer cerrado al público.
A su salida, Martinelli se puso la mascarilla dijo que estaba buscando un ’delivery’, sin embargo, las fotos comprometen su respuesta.
Hasta el momento, ninguna autoridad del Minsa se ha pronunciado al respecto, y la ciudadanía exige una investigación como sucedió en los restaurantes Jimmy y La Fragata, así como en fiestas llevadas a cabo en Condado del Rey y Farallón, y recientemente en el funeral de Wendy Rodríguez, en Santa Ana.