Desde el 8 de agosto de 2019, el Pleno de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), admitió de forma unánime la querella penal presentada contra el diputado del Partido Revolucionario Democrático (PRD), Arquesio Arias, de la Comarca Guna Yala, por la presunta comisión del delito contra la libertad e integridad sexual, sin embargo las víctimas temen que no haya justicia por la circunstancia de la persona querellada.
La abogada querellante Enereida Barría dijo que el silencio en torno a este caso es preocupante, sobre todo cuando en un hecho como el denunciado de violación sexual por dos mujeres, entre ellas una menor de edad, lo que procede es la realización de la audiencia de imputación y la aplicación de medidas cautelares, pero nada de eso a pasado y el supuesto agresor se mantiene en su cargo de diputado.
PUEDE LEER: Por supuesto acoso sexual y laboral, pleno cita al Defensor del Pueblo para que responda | VIDEO
Como fiscal del caso el Pleno designó al magistrado Olmedo Arrocha y como Juez de Garantías al magistrado Harry Díaz.
La abogada Barría indicó que uno de los casos ocurre cuando la joven va a una atención médica normal, para un Papanicolaou y es abusada sexualmente por parte del indiciado que laboraba como médico ginecólogo en una comunidad de la Comarca Guna Yala.
Barría indicó que en el otro caso la menor de edad va a la instalación de salud por un dolor de estomago y ocurre el supuesto abuso.
Agregó que el caso ocurre cuando el querellado no era diputado, por lo que la investigación inicia en el Ministerio Público, donde se les hizo las entrevistas a las víctimas, las evaluaciones ginecológicas y psicológica y quedó acreditado el delito de violación sexual.
PUEDE LEER: Corte Suprema se pronuncia sobre la Beca Universal
La abogada indicó que las víctimas han sido coherentes y consistentes en sus declaraciones a lo largo de las entrevistas en el sentido de existió la relación sexual violenta, no consentida.
El diputado Arias fue postulado por el PRD y electo cuando ya tenía un proceso de investigación andando, lo grave ahora es el silencio de la propia Asamblea Nacional que frente a los hechos denunciados no se pronuncia para que haya justicia a favor de las víctimas.