Jorge Luis Quijano, administrador del Canal de Panamá, recibió el mayor título honorífico que entrega la Universidad Santa María La Antigua (USMA) por sus logros y contribuciones a la industria marítima de Panamá.
El doctorado Honoris Causa, entregado por monseñor José Domingo Ulloa como Gran Canciller de la USMA y el ingeniero Juan Planells Fernández como Rector Magnífico de la casa de estudios, es “un reconocimiento para todos los canaleros”, manifestó Quijano.
En la ceremonia de investidura, Quijano contó distintas experiencias vividas en los 43 años como colaborador de la ruta interoceánica y envió un mensaje alto y claro contra la corrupción.
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“Ya está bueno que sigamos teniendo una capacidad de permitir el nivel de corrupción que se ha dado en nuestro país”, comentó en declaraciones a los medios.
Agregó que hay “una tradición de aceptación de que las cosas se pueden hacer mal y que las debemos aceptar”.
Destacó la importancia del artículo 316 de la Constitución Política de Panamá pues ha permitido a la Autoridad del Canal de Panamá a trabajar con institucionalidad y pidió que no haya mayores cambios en este aspecto ante las posibles reformas constitucionales.
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“Tenemos un título constitucional y una ley que ha sobrevivido 20 años y ha demostrado ser de beneficio para todos los panameños. No vale la pena trastocarla”, mencionó ante todos los presentes.
Además calificó a Jorge Eduardo Ritter como el “Nostradamus”, pues para Quijano fue él quien pidió alejar a la Autoridad del Canal de Panamá (ACP) de la política.
Quijano entró a la ACP en diciembre de 1975 y confesó que la etapa más complicada de su carrera fue soportar los momentos de incertidumbre que había con Grupo Unidos por el Canal (GUPC).
“La parte más difícil para mí en este tiempo fue con GUPC pues queda uno solo tomando las decisiones. Se comparte mucho, pero es a las 2 y 3 de la mañana que uno está pensando en la decisión que debe ser tomada con cabeza fría y que el corazón no te lleve a tomar malas decisiones”.