Un grupo de padres con hijos con discapacidad y beneficiarios de programas sociales alzó su voz frente a las oficinas del Ministerio de Desarrollo Social (Mides) en David, exigiendo respuestas tras haber sido excluidos de subsidios que consideran vitales. La protesta surge en medio del proceso de depuración de los programas Ángel Guardián y 120 a los 65, que dejó a cientos sin acceso a estas ayudas en distintas regiones del país.
Los manifestantes explicaron que al intentar cobrar los beneficios, se encontraron con cancelaciones inesperadas. “Esto lleva días causando preocupación e incertidumbre,” expresó una madre afectada. Durante la protesta, lograron dialogar con funcionarios del Mides, quienes prometieron que los pagos atrasados serían procesados en los próximos días, solicitando paciencia mientras solucionan las irregularidades administrativas.
Sin embargo, la desconfianza persiste. “No nos iremos hasta que cumplan con lo que han dicho,” advirtieron los afectados.
Depuración bajo la lupa
El Mides justificó las exclusiones bajo el argumento de que busca garantizar que los subsidios lleguen a quienes realmente cumplen con los criterios de elegibilidad, tras detectar irregularidades. Según la ministra Beatriz Carles, “cumplir la Ley” es prioritario, explicando que el programa Ángel Guardián, que atiende a 170 mil personas con discapacidad severa y en condiciones de pobreza extrema, enfrenta serias limitaciones presupuestarias.
Beneficiarios del programa Ángel Guardián protestaron en las instalaciones del @MIDESPma en David, provincia de Chiriquí. Denuncian que no recibieron el último pago y exigen saber por qué fueron excluidos. #TReporta pic.twitter.com/nT6CflS5o9
— Telemetro Reporta (@TReporta) December 6, 2024
No obstante, Carles anunció que las exclusiones quedarán suspendidas hasta 2025 para reevaluar caso por caso. Además, aseguró que la Comisión de Presupuesto de la Asamblea Nacional aprobó más de 4 millones de dólares para cubrir pagos atrasados de octubre a diciembre, garantizando que los beneficiarios recibirán sus transferencias antes de finalizar el mes. “No deben preocuparse ahora mismo por las reconsideraciones,” afirmó.
Esperanza en medio de incertidumbre
Mientras tanto, las familias afectadas esperan que este proceso sea justo y rápido. Para muchos, los programas sociales representan un soporte indispensable para sobrellevar condiciones de vida difíciles. A pesar de las promesas, los manifestantes dejaron claro que seguirán atentos para evitar que sus derechos sean vulnerados nuevamente.