Los usuarios de la terminal de transporte de Albrook ya no podrán recargar sus tarjetas de transporte con monedas de un balboa, conocidas como “Martinelli”, debido a un aumento significativo en el costo de manejo de estas monedas.
Gustavo Granados, director de operaciones de la terminal de transporte de Albrook, informó que esta medida se debe a que uno de los proveedores de servicios bancarios incrementó el costo del manejo de estas monedas aproximadamente 55 veces más de lo que se pagaba anteriormente, a partir de septiembre. Este incremento ha llevado a la terminal a tomar la decisión de no aceptar las monedas de un balboa para recargar tarjetas de transporte.
Granados aseguró que, a pesar de esta restricción, se han habilitado opciones para que los usuarios puedan realizar pagos con otras monedas, como las de 5, 10 y 25 centavos. Estas monedas serán aceptadas en las ventanillas de recarga ubicadas en distintos puntos de la terminal. Además, se mantendrá la opción de recargas electrónicas para mayor conveniencia de los usuarios.
“Tomamos esta decisión por este incremento y tratamos de darle respuesta al usuario, además, tenemos cajas disponibles para que los clientes puedan hacer algún tipo de pago con otro tipo de monedas como 5 centavos, 10 centavos, 25 centavos, entre otras”, afirmó Granados. También mencionó que desde septiembre no está permitido hacer recargas con monedas de un balboa en las máquinas, y que su equipo ha estado informando a los pasajeros sobre los motivos de esta medida.
La terminal de transporte de Albrook cuenta con aproximadamente 72 máquinas de recarga en uso diario y atiende a unos 42 mil usuarios diariamente. Granados resaltó que esta decisión no tiene relación con las recientes declaraciones del gerente del Banco Nacional, Javier Carrizo, sobre un proyecto de ley para retirar de circulación las monedas de un balboa.
La decisión de no aceptar monedas de un balboa para recargar tarjetas de transporte en la terminal de Albrook ha sido una medida necesaria debido al aumento en los costos de manejo. Aunque esto ha generado incomodidad entre algunos usuarios, se han dispuesto alternativas para minimizar el impacto y seguir ofreciendo un servicio eficiente a los miles de pasajeros que utilizan esta terminal diariamente.