En nuestro calendario de celebraciones patrias, el 28 de noviembre equivaldría al 5 del mismo mes cuando recordamos cómo se selló el proceso a través del cual la nación avanzó hacia la búsqueda de mejores días para sus ciudadanos. Y así como los actos valientes en la ciudad de Colón consolidaron la separación de Colombia, la proclamación de independencia de España en el edificio del Cabildo en la capital supuso no solo la ruptura de 301 años de vida colonial, sino el momento para dar el paso al sueño bolivariano, con todas las implicancias que el hecho supuso.
Por todo lo anterior, no podemos permitir que esta fecha pase como un mero asueto, mientras que los panameños nos vamos desprendiendo poco a poco de su gran significado.
La cercanía de esta importante fecha con las fiestas decembrinas provoca que muchos la supriman, lo que implica hacer un esfuerzo adicional a nivel educativo y cívico para que respetemos todo lo que implica el haber formado parte de la corona española y la posterior unión con la Gran Colombia. La historia no se cuenta por partes, se cuenta completa.