El presidente José Raúl Mulino presentó su primer informe al país, justo cuando se instala la segunda legislatura del periodo 2024-2025. En su discurso, resaltó la urgencia de reformar la Caja de Seguro Social, pidió apoyo a la Asamblea para aprobar leyes que achiquen el Estado, e insistió en que los nuevos procuradores tienen total libertad para combatir la corrupción sin “enemigos” de por medio.
Una de sus frases más llamativas fue: “Desde el primer día, la fiesta de unos pocos se acabó”. Con ella, dejó en claro que su administración busca cortar gastos innecesarios y deshacerse de empleados sin funciones reales, lo que él mismo califica como “botellas”. Sin embargo, reconoció que la legislación vigente complica este proceso, pues a veces la salud de un trabajador sirve como excusa para no ser despedido.
Mulino se refiere a la asignatura de Relaciones entre Panamá y Estados Unidos.https://t.co/rLx5Yn38em pic.twitter.com/gKc4UlpAtG
— La Prensa Panamá (@prensacom) January 2, 2025
Otro punto clave fue la insistencia en avanzar con un Proceso Constituyente Originario, anunciando que 2025 será el “Año de la Alfabetización Constitucional”. Según Mulino, es un “imperativo ético y moral” para transformar el país y forjar un pacto social más moderno y justo. Además, prometió que habrá “mayor creatividad económica” para este año, a la vez que recalcó que su prioridad es bajar el precio de las medicinas, poniendo a disposición de las farmacias las 20 más utilizadas a un costo reducido.
Cerrando su discurso, el mandatario advirtió que este será “el año de las respuestas concretas”, exigiendo resultados a los funcionarios de todas las instituciones. “La paciencia del pueblo tiene límite”, subrayó.