“Queremos recordarle a todo el país que así como en el área de Koskuna, en el día de hoy y de mañana la cuarentena es total. Nosotros hemos visto hoy una gran cantidad de vehículo transitando, cuando en la calle no debería haber nadie que no fuera Ministerio de Salud, Policía o personal estrictamente necesario para el funcionamiento de las empresas bases, que estuvieran supliendo algún tipo de elemento que fuera necesario para la vida”.
Esa fue la crítica que hizo esta mañana el ministro de Salud, Luis Francisco Sucre, durante su visita al hospital modular de Albrook, el cual ya comienza a equiparse. En el lugar, Sucre habló del cerco sanitario que el mediodía de este viernes fue ordenada para la comunidad de Koskuna, en Veracruz, distrito de Arraiján, y dijo que la medida se dio porque pese a los llamados ahí para que la gente se mantuviera en sus casas, “no se han dado muy buenos resultados”.
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Agregó que la rígida de cerco sanitario implica que los residentes no pueden desplazarse para nada, para los cual el Estado les garantizará sus alimentos que necesiten a través del Panamá Solidario, así como el agua.
Empiezan a equiparlo
Sobre el hospital modular, explicó que la próxima semana debe concluir con su equipamiento y luego debe hacerse una limpieza profunda y descontaminación, para recibir a los pacientes en grado clínico “muy delicado”.
“El Ministerio de Salud está trabajando a la vez con todo lo que es la adecuación del personal, el entrenamiento de ese personal médico, que tiene que venir a estas instalaciones, conocerla bien, yo creo que la próxima semana podríamos estar dando los primeros inicios”, explicó Sucre.
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Al respecto, el ministro de Obras Públicas, Rafael Sabonge, destacó que el hospital está en recoger detalles, como la terminación de la sala del tomógrafo, que no es modular y que estará integrado por un aparato que será traído del Hospital Santo Tomás. Destacó la donación de unos calentadores de agua con tecnología termosolar, donado por la ONU para el hospital.