El Ministerio de Desarrollo Agropecuario (MIDA) se reunió con la Asociación Nacional de Productoras Pioneras en Arroz de Bajo en Carbono (ANPPAC) y el Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA) con el fin de fortalecer la comercialización del arroz producido bajo condiciones de Medidas de Mitigación Nacionalmente Apropiadas (NAMA) en Panamá. Esta iniciativa busca alinear las prácticas agrícolas con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y la lucha contra el cambio climático.
Rodrigo Morán, director de Agroindustrias del MIDA, destacó que en tiempos de cambio climático es fundamental desarrollar programas enfocados en la sostenibilidad y en el cumplimiento de los ODS. Por su parte, Karen González, presidenta de ANPPAC, señaló la importancia de conocer más sobre las características del empaque y el manejo post cosecha para asegurar que el arroz llegue de manera eficiente y sostenible a los consumidores.
La presidenta de ANPPAC también subrayó la necesidad de crear una organización sólida que facilite la conversación sobre estrategias de comercialización y mercadeo, además de destacar la colaboración con entidades como el Ministerio de Comercio e Industrias (MICI) y el Ministerio de Salud (MINSA) para fortalecer la cadena de producción y distribución.
El proyecto, financiado por la Secretaría Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación (SENACYT), abarca a 100 productores que trabajan en 666.1 hectáreas en las provincias de Veraguas, Coclé y Chiriquí. Esta iniciativa se apoya en Escuelas de Campo (ECA) y parcelas demostrativas, utilizando tecnología de punta como plataformas Blockchain para asegurar la trazabilidad y calidad del producto. La producción estimada es de 48,650 quintales de arroz bajo en carbono.
En el encuentro se destacó la necesidad de contar con un molino especializado para garantizar la eficacia y evitar la contaminación cruzada, lo que resulta esencial para mantener los estándares de sostenibilidad y calidad en el mercado.
Este proyecto representa un avance significativo en el sector arrocero panameño, alineando esfuerzos con el Plan Nacional Agroambiental y la lucha contra el cambio climático, esperando no solo beneficiar a los productores, sino también ofrecer un producto de alta calidad y sostenible a los consumidores.