El reciente anuncio de la Federación Panameña de Fútbol (FEPAFUT) sobre el uso indebido de su escudo por parte de partidos políticos ha generado atención en todo el país. En un comunicado oficial, la federación dejó en claro que su emblema, que representa al fútbol panameño, no debe ser utilizado con propósitos políticos.
En un momento en que el uso de símbolos deportivos con fines políticos se ha vuelto común en muchas partes del mundo, FEPAFUT ha decidido tomar una posición firme para proteger la integridad y la neutralidad de su imagen. En su comunicado, expresaron preocupación por el uso indebido de su escudo, resaltando que este representa los valores del deporte y la unidad nacional, y no debe ser manipulado con fines partidistas.
FEPAFUT enfatizó que su escudo es un símbolo oficial registrado cuyo uso debe ser respetado y protegido de cualquier intento de apropiación política. Esta medida refleja el compromiso de la federación con la preservación de la identidad del fútbol panameño y su firme postura contra cualquier intento de instrumentalizar su imagen con objetivos ajenos al deporte.
Además, la federación envió un mensaje claro a la sociedad sobre la importancia de separar el deporte de la política, promoviendo así la unidad y el respeto en la sociedad panameña. Finalmente, FEPAFUT invitó a todos los panameños a vivir en paz en la semana previa a las elecciones del domingo 5 de mayo de 2024.
Es importante destacar que la FIFA tiene directrices claras con respecto al uso de los símbolos de las selecciones nacionales de fútbol para fines políticos. Consideran que estos emblemas representan los valores del fútbol y la identidad nacional, y deben ser protegidos de cualquier explotación política.
La FIFA prohíbe explícitamente el uso de los emblemas de las selecciones nacionales para propósitos políticos o partidistas, y ha tomado medidas enérgicas contra aquellos que han violado estas regulaciones en el pasado. Por lo tanto, cualquier intento de utilizar los escudos de las selecciones nacionales de fútbol en el ámbito político sería contrario a las regulaciones de la FIFA y podría resultar en acciones disciplinarias por parte de la federación internacional.