Un grupo de médicos, enfermeras y personal administrativo del Hospital Rural del Oriente de Chiriquí protagonizó una protesta en las afueras del centro de salud, exigiendo el pago de jornadas extraordinarias adeudadas desde junio de 2024. La manifestación también incluyó demandas por la reparación de equipos esenciales, como el mamógrafo, que lleva más de un año fuera de servicio.
Pagos atrasados y contratos sin cumplir
El vocero de los médicos, Aurelio Cedeño, denunció que muchos compañeros que trabajan por contrato no han recibido sus pagos desde el cambio de gobierno, lo que ha generado incertidumbre entre los empleados. “El pago de los turnos extras es esencial para nuestro sustento, pero estamos desde junio sin recibir nada”, explicó.
Además de los problemas salariales, señalaron que falta de insumos médicos ha dificultado la atención a los pacientes, pero aún así han continuado ofreciendo servicios con limitaciones.
Mamógrafo dañado afecta campaña de detección de cáncer
Durante la protesta, Dionisio Camarena, vocero de los funcionarios de salud, denunció que el hospital lleva más de un año sin mamógrafo operativo, afectando la campaña Cinta Rosa, clave para la detección temprana del cáncer de mama. “El gobierno no ha agilizado el contrato de mantenimiento, dejando a la comunidad sin un servicio vital en plena campaña de prevención”, afirmó Camarena.
Compromiso con la atención pese a las dificultades
Los funcionarios aseguraron que, pese a las carencias, han mantenido la atención médica para la comunidad. Sin embargo, pidieron el respaldo del gobierno para mejorar las condiciones laborales y garantizar una atención de calidad a los usuarios del hospital.