Las escuelas panameñas han estado funcionando entre pupitres rotos, sillas sin patas y equipos en desuso, pero el Ministerio de Educación (Meduca) finalmente ha iniciado una limpieza masiva en más de 409 centros educativos. En San Miguelito, la primera región intervenida, se han retirado más de 17 toneladas de material deteriorado, incluyendo mobiliario escolar, computadoras obsoletas y artículos eléctricos dañados. Esta medida busca mejorar las condiciones de las aulas de cara al año lectivo 2025, aunque padres y docentes temen que la falta de reemplazos adecuados deje a los estudiantes sin los recursos necesarios.
El jefe de Bienes Patrimoniales del Meduca, Ramiro García, informó que el proceso se lleva a cabo en conjunto con el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) y la Contraloría General de la República, asegurando el cumplimiento de las normativas estatales. Sin embargo, en muchas escuelas persisten problemas estructurales como techos con filtraciones, baños inoperantes y falta de electricidad, lo que genera incertidumbre sobre si esta “operación limpieza” realmente mejorará el entorno educativo. La directora regional de San Miguelito, Aymeth Espinosa, explicó que esta jornada incluye la identificación y retiro de activos en mal estado, con el objetivo de optimizar los espacios en beneficio de los estudiantes.
Aunque la eliminación de chatarra es un paso importante, la comunidad educativa insiste en que la verdadera crisis es la falta de inversión en infraestructura y equipos nuevos. Padres de familia han exigido que el Meduca no solo saque lo viejo, sino que garantizan reemplazos adecuados para que los alumnos no tengan que estudiar en condiciones precarias. Mientras tanto, el descarte de mobiliario continuará en otras regiones como Panamá Centro, Herrera y Veraguas, en espera de que esta medida no sea solo un maquillaje temporal, sino el inicio de una verdadera transformación en las escuelas del país.