En la provincia de Chiriquí, el Juzgado Seccional de Familia ha registrado un total de 1,022 casos durante el primer semestre del año, según los datos proporcionados por la entidad. Estos casos fueron distribuidos entre el juzgado primero, segundo y tercero, lo que refleja una alta carga de trabajo para el sistema judicial en la región.
De los casos registrados, 492 resultaron en sentencias y 387 en autos resolutivos. Este volumen de trabajo ha llevado a la realización de 769 audiencias en el mismo período. El Juzgado Primero Seccional de Familia llevó a cabo 281 audiencias, mientras que el juzgado segundo efectuó 157 y el juzgado tercero, 31.
Un informe preliminar, elaborado por los secretarios judiciales de los juzgados, destaca que los casos de guarda, crianza y reglamentación fueron los más numerosos, con más de 700 casos abordados. Además, los temas de divorcios por mutuo consentimiento, filiación e imputación de paternidad también ocuparon una parte significativa del trabajo de los juzgados.
A pesar de la alta carga de trabajo, los juzgados de familia en Chiriquí continúan resolviendo asuntos patrimoniales, bienes familiares y otros casos como nulidad y divorcio, entre otros. Este esfuerzo continuo demuestra el compromiso de la entidad en mantener la justicia y el bienestar de las familias en la región.