Mark Carney ha sido elegido como el nuevo líder del Partido Liberal de Canadá y, por ende, primer ministro, reemplazando a Justin Trudeau. Esta elección se produce en un contexto de crisis política y tensiones comerciales con Estados Unidos, donde el presidente Donald Trump ha intensificado sus ataques contra Canadá, incluyendo la imposición de aranceles y afirmaciones sobre la inmigración ilegal.
Carney, exgobernador del Banco de Canadá y del Banco de Inglaterra, ganó la votación entre aproximadamente 400 mil miembros del partido, superando a la exviceprimera ministra Chrystia Freeland. Su mandato como primer ministro comenzará inmediatamente, aunque Trudeau permanecerá en el cargo durante un periodo de transición no especificado.
Uno de los desafíos más urgentes que enfrentará Carney será abordar el deterioro de las relaciones con Estados Unidos. Las tensiones han afectado a la sociedad canadiense, generando reacciones negativas hacia productos estadounidenses y provocando un clima político convulso. Carney se medirá en las próximas elecciones federales contra Pierre Poilievre, líder del Partido Conservador, quien ha intentado distanciarse de las comparaciones con Trump.
La situación se complica aún más para el Partido Liberal, que ha visto una caída en su popularidad y enfrenta una competencia feroz en las próximas elecciones programadas para octubre, aunque podrían adelantarse. La salida de Trudeau sigue a una serie de crisis internas y descontento económico, lo que ha llevado a un cambio significativo en el liderazgo del partido.