Se llama Luis Acevedo Ureña. No es muy conocido, pero en ciertos círculos de poder, su presencia no pasa inadvertida. Acevedo –sin ser parte del engranaje gubernamental– es la figura que representa a otra que sí tiene poder. Él es la persona de confianza que maneja los negocios del vicepresidente de la República, José Gabriel “Gaby” Carrizo.
Un exfuncionario de este gobierno –que salió de mala forma– dijo a este medio que Acevedo, aunque no es un servidor público, es parte de una red de funcionarios que presionan a favor de decisiones en instituciones del Estado, incluidas las autónomas, como bancos estatales, en lo referente a contrataciones de bienes y
servicios, actuando –según comunica– como emisario de Carrizo. Su alcance llega, según la fuente, hasta la Contraloría. Al menos, hasta mandos medios bien conectados, se pudo corroborar.
La fuente, que declaró bajo estricta confidencialidad, tuvo que lidiar personalmente con Acevedo. Pero indicó que él no era el único en esa red. Mencionó a Nadia del Río y Alexander Hepburn, ambos nombrados en el Ministerio de la Presidencia al día siguiente –2 de julio de 2019– de tomar posesión Laurentino Cortizo.
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Ambos fueron recompensados con nombramientos, pero Acevedo no, aunque es comprensible, dado su rol.. Empero, sus negocios y familia son otra historia.
Por ejemplo, una hermana de la esposa de Acevedo –llamada Sara House Cobos– fue nombrada en septiembre de 2019 como cónsul de Panamá en Tampa (EU).
Así, entre conexiones y vinculaciones, es Acevedo es el hilo conductor de esta historia, en la que se mezcla lo oficial y lo privado.
El debut
Acevedo sonó por primera vez poco después de tomar posesión el Gobierno. Un contrato directo de $550 mil fue concedido por el Ministerio de la Presidencia –bajo la gestión de Carrizo– a la entonces recién creada sociedad Contenidos Digitales,
S.A., cuyo domicilio era un apartamento en Punta Pacífica y su agente residente era Acevedo.
Acevedo, un par de meses antes –en junio de 2019– fue declarado idóneo por el Ministerio de Gobierno para ejercer como magistrado de la Corte Suprema de Justicia. Esta certificación fue comunicada a Michelle Arango Cobos, su esposa.
Michelle Arango fue nombrada en la estatal Caja de Ahorros, como gerente de Jurídica del banco. Pero meses después, escaló a secretaria general de la Superintendencia de Bancos.
La cercanía de Acevedo y Carrizo era tal, que en 2006 ambos se convirtieron en socios en la firma CYA Abogados, así como el abogado Enrique Garrido, actual embajador de Panamá en Bolivia. El 2 de mayo de 2019, siendo vicepresidente electo, Carrizo se separó temporalmente de la firma, y Acevedo asumió la presidencia y representación legal de CYA Abogados.
Villa Belén, Penonomé
Carrizo también se asoció en 2007 con sus hermanos en una pequeña empresa de construcción, en la que –hasta la víspera de ser juramentado vicepresidente–devengaba un salario de menos de $700 mensuales. Para entonces, Carrizo y su esposa, Julieta Spiegel, vivían en Villa Belén, un pequeño conjunto residencial de costo modesto ubicado en Penonomé, casa que no frecuentaron más hasta poco después de ser electo vicepresidente.
La madre de Acevedo también está en el Gobierno: Maritza Ureña González fue nombrada –el 2 de julio de 2019– como subdirectora en la Dirección General de Ingresos (DGI) del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF). Ella había estado allí antes. Según su biografía, laboró para la DGI como auditora fiscal en el Gobierno de Ricardo Martinelli. Su jefe inmediato habría sido Luis Cucalón, (exdirector de la DGI) y el jefe de este, Frank de Lima (hoy ex titular del MEF). Este último fue está imputado por lavado de activos en el caso Odebrecht y el primero fue condenado por corrupción de funcionarios y peculado.
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La DGI confirmó a este medio que Maritza Ureña González “tiene la tarea de coordinar y dirigir” los procesos de fiscalización en general, es decir, que ella estaría dirigiendo la auditoría que la DGI le hace a los Súper 99 –pertenecientes a la familia del expresidente Martinelli– empresa también imputada por lavado de activos en el caso local de Odebrecht, e investigada por el FBI.
Acevedo, tras incorporarse el año pasado a la firma de su esposa –Estudio Jurídico y de Administración– inscribió en el Registro Público –el 16 de abril de 2021–dos fundaciones: Llano Marín I, cuya fundadora es la esposa del vicepresidente, Julieta Spiegel Fernández, y Fundación Llano Marín II, cuyo fundador es el suegro del vicepresidente y padre de Julieta, Julio Spiegel Richa.
Una fundación de interés privado es una figura jurídica que protege los bienes que le han sido otorgados. Su patrimonio es independiente del fundador, y por ello, los activos de una fundación son inembargables por causas imputadas al fundador. Entonces, ¿qué protegen estas fundaciones?
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