Un incendio de gran magnitud arrasa la reserva de agua en el cerro Guacamaya, en Penonomé, Coclé, donde el viento sigue avivando las llamas. A pesar de los esfuerzos de los bomberos y el Ministerio de Ambiente, más de mil hectáreas ya han sido afectadas, y el fuego avanza rápidamente en una zona de difícil acceso.
El capitán Ángel Delgado, del Cuerpo de Bomberos, explicó que alrededor de 50 unidades especializadas en incendios forestales, junto a diversas instituciones, trabajan sin descanso para extinguir las llamas. Además, se está coordinando el uso de helicópteros del Servicio Nacional Aeronaval (Senan) con la esperanza de sofocar los puntos críticos.
La coronel Margarita Ducreux, jefa de los bomberos en Coclé, reconoció que el viento y el terreno empinado complican los trabajos de control. La principal preocupación es que esta reserva surte de agua a 52 comunidades, por lo que la escasez y la contaminación del recurso podrían ser graves consecuencias si el incendio no se detiene pronto.