En una sesión cargada de tensiones, la Asamblea Nacional de Panamá aprobó en tercer debate el presupuesto general del Estado para el año 2024, alcanzando una cifra récord de $30,690.4 millones, siendo el más alto de la historia del Panamá.
La votación, que resultó en 44 a favor, 16 en contra y dos abstenciones, estuvo marcada por fuertes enfrentamientos entre los diputados, destacando la confrontación entre Benicio Robinson Grajales y Juan Diego Vásquez.
El presidente de la Comisión de Presupuesto, Robinson, denunció intentos de dilatar la discusión, asegurando que algunos diputados buscaban bloquear la aprobación.
Durante el acalorado debate, Robinson defendió el presupuesto, argumentando que el aumento era necesario dada la tendencia histórica de incremento presupuestario anual. Además tildó a Juan Diego como un “pichón” de diputado, lo retó a mostrar su hombría y le dijo que cuando va a San Miguelito no le “resuelve” a sus votantes.
La disputa entre los legisladores no solo se centró en cifras financieras, sino también en críticas a la asignación de recursos.
Vásquez expresó su desacuerdo con el presupuesto, destacando un cálculo de ingresos mal dirigido y oponiéndose a gastos para la clase política.
Otros diputados, como Edison Broce, cuestionaron la creación de nuevas entidades y la asignación de fondos a instituciones específicas.
Broce cuestionó el alto presupuesto, el 7 % y la creación de más entidades, como el Ministerio de la Mujer, una institución que indica se presta para la corrupción ya que piensa que la creación de tantas entidades no tienen sentido. También criticó que se le de dinero al canal estatal SerTv y que por ejemplo el Ifraruh que dicho sea de paso se encuentra mencionado en el escándalo de los auxilios económicos tenga más presupuesto que el Órgano Judicial.
El ministro de Economía y Finanzas, Héctor Alexander, anunció ajustes en el presupuesto, destacando la eliminación del vale digital y la focalización del subsidio al tanque de gas. Asimismo, se redujo el pago de viáticos y dietas, permitiendo ajustes salariales en diversas instituciones para el año 2024.
A pesar de las tensiones, se reclamó un aumento en los fondos destinados a temas críticos como educación, salud y obras públicas. El ministro de Salud informó sobre la asignación de $20 millones al Instituto Oncológico Nacional, con ejecución prevista en 2024 y la puesta en marcha de la fase operativa en 2025.
En resumen, la aprobación del presupuesto 2024 en Panamá no solo marca un hito financiero, sino que también refleja profundas discrepancias y tensiones entre los legisladores respecto a la asignación de recursos y las prioridades nacionales.