En una jornada marcada por la polémica y los argumentos legales, el exmagistrado de la Corte Suprema de Justicia, Harry Díaz, ha solicitado al máximo tribunal del país que declare inconstitucional la candidatura a la presidencia de la República de José Raúl Mulino, abanderado de los partidos Realizando Metas (RM) y Alianza.
La petición de Díaz se fundamenta en una serie de violaciones constitucionales y normativas que, a su parecer, invalidan la candidatura de Mulino. En una audiencia celebrada este lunes 8 de abril, Díaz expuso su opinión durante el inicio del período de alegatos a favor y en contra de la demanda interpuesta contra el Acuerdo 11-1 del Tribunal Electoral (TE).
Este acuerdo, emitido el 4 de marzo de 2024, autorizó a Mulino a asumir la candidatura presidencial de RM y Alianza tras la inhabilitación de Ricardo Martinelli por su condena en el caso New Business.
Entre los argumentos presentados por Díaz, destaca la violación de varios artículos de la Constitución Política de Panamá, así como de normativas electorales y estatutos partidarios. El exmagistrado sostiene que la candidatura de Mulino no fue sometida a votación en las elecciones primarias de RM, ya que fue designado directamente por Martinelli y ratificado por los directorios de los partidos RM y Alianza.
En su intervención, Díaz hizo hincapié en la responsabilidad del Tribunal Electoral en garantizar la transparencia y el cumplimiento de las normativas electorales, señalando que la omisión de realizar primarias internas en el partido RM constituye una clara violación de los principios democráticos y representativos consagrados en la Constitución.
Además, Díaz advirtió sobre el riesgo de establecer como candidato a alguien con múltiples procesos penales avanzados, destacando la falta de acción por parte del partido RM para enmendar su decisión tras la condena de Martinelli.
En su petición a la Corte Suprema, Díaz solicitó una advertencia especial en caso de que la decisión se pronuncie después de las elecciones del 5 de mayo. En tal caso, propuso dos posibles escenarios: respetar al segundo candidato presidencial con más votos en las primarias de RM, o convocar a nuevas elecciones sin la participación de Mulino en caso de que su candidatura sea declarada inconstitucional.
La demanda presentada por Díaz plantea un desafío legal de gran relevancia en el panorama político panameño, con implicaciones significativas para el desarrollo de las próximas elecciones presidenciales.