Tras una reñida elección presidencial histórica en Panamá, el Partido Revolucionario Democrático (PRD) se alzó vencedor con el 33 % de los votos junto al Molirena.
Es por esto que El Preguntón sorprendió ejercitándose, en su caminata diaria, a José Gabriel Carrizo y lo abordó para conocer lo que lo llevó a ser el vicepresidente electo de la República de Panamá.
¿Cree usted que ser el compañero de fórmula más joven de las elecciones influyó para atraer el voto juvenil?
“Yo creo que más que influir para atraer el voto, el mensaje de Nito Cortizo fue darle oportunidad a la nueva generación que quiere hacer las cosas distintas, una generación que reclama una participación para tomar decisiones y no solamente como se decía en campaña, repartir volantes. Estoy seguro de que al igual que yo hay muchos jóvenes talentosos”.
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Ya se ha dicho que usted no va a ser canciller. ¿Va a ocupar un puesto en un ministerio o seguirá siendo el asesor de Cortizo?
“Eso es decisión del presidente electo. Lo único que le he pedido es que cuando piense en Carrizo, piense en algo que me permita estar en contacto con la gente. Y estoy convencido de que un gobierno divorciado del contacto permanente con la gente es un gobierno condenado al fracaso”.
¿Cómo van a manejar Nito y Carrizo la vieja escuela del PRD con las nuevas corrientes del partido?
“Como lo hemos hecho, ‘uniendo fuerzas’, como es nuestro eslogan. Unimos fuerzas con el propósito de ver un mejor Panamá, de transformar y defender los intereses nacionales y mejorar la calidad de vida de los panameños. La unidad del PRD en estos últimos tres años se ha visto reflejada con base en ese propósito, no con base en que tú me miraste mal o me traicionaste. Las decisiones se toman en una sola mesa. Diferentes corrientes que históricamente no se podían sentar juntas hoy en día están trabajando por el mismo objetivo”.
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¿Cómo maneja usted su vida familiar ahora que es vicepresidente electo?
“Hay que dedicarle tiempo a la familia, mi núcleo es mi esposa y mis hijos. Lo más importante es la convivencia”.
¿Cómo reacciona usted a los memes o scketch en redes sociales? ¿Le afectan o los disfruta?
“Yo no manejo las redes sociales y cuando tengo que poner algo solicito que lo suban. Pero cuando llego a la casa en la noche me entero en los grupos de WhatsApp y me echo a reír con mi esposa. Pero esto es importante y lo recalcaré durante cinco años. En la democracia es permisible que el pueblo se burle de los gobernantes y debo tener tolerancia si el pueblo se burla de mí, pero lo que es inadmisible es que nosotros los gorbernantes nos burlemos del pueblo. Eso no se puede permitir y los gobernantes se burlan del pueblo cuando prometen cosas que no pueden cumplir”.
Vice, ¿qué fue lo que pasó con el celular en el discuro de Nito que se hizo viral?
“Esa fue una noche muy larga. Me fui al centro de operaciones nuestro y me entregan un celular del Tribunal Electoral, ya tenía el mío personal y un Blackberry que teníamos Nito y yo para conversar, ya que es seguro por sus cifrados. Pongo mis tres celulares en la mesa y en medio anuncio comienza a sonar con mensajes de muchas felicitaciones y lo volteo para no distraer el momento, pero fue al revés. Je, je, je. Es parte de la democracia”.