Mañana, 1 de mayo, se celebra el Día del Trabajador a nivel local y mundial, y este espacio es para los hombres y mujeres que han resistido a lomo partido más de un año de pandemia.
Hoy queremos darles una palmadita a los trabajadores que nunca han recibido un vale o un bono del Gobierno, a los que tuvieron que arriesgar su vida trabajando a pesar de la pandemia, a los que les recortaron los salarios, pero no dejaron de laborar, a los que les suspendieron los contratos, a los que mandaron de vacaciones, a los que sacaron de las planillas y quedaron desamparados.
Hoy les damos un aplauso de pie a los que nunca se han rendido, a los que han agachado el lomo por sus vidas, por sus familias y por el país, pese a la indiferencia de las autoridades, empresas o sindicatos.
Para esos trabajadores del campo, que nunca recibieron vales ni bolsas de comida; a las trabajadoras domésticas, a las que el teletrabajo de sus patronas las dejó sin oficio; no nos queda más que darles un abrazo de solidaridad a todos los obreros, sin importar si son formales o informales. Son trabajadores.