Lo que pasa en la tierra del poeta Rubén Darío duele en el alma.
Nicaragua es una de las regiones más pobres de Centroamérica, pero ahora está gobernada por una pareja de tiranos que se atreve a desterrar a patriotas porque no le hacen la venia ni le patrocinan sus desmanes.
Daniel Ortega, su esposa y familiares se han atrevido a todo en Nicaragua porque controlan el aparato militar, ese mismo esquema que usó Somoza para enriquecerse mientras el pueblo se empobrecía.
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Pero si a “Tachito” Somoza lo sacó la revolución del pueblo, al dictador de ahora lo tumbarán los deseos de democracia y libertad de la mayoría de nicas.
Y es que la libertad es imparable y por más que unas botas, un rifle o la avaricia quieran anularla, no podrán porque al final se impone como una fuerza abrumadora y más tarde que temprano patriotas nicas como Sergio Ramírez, Gioconda Belli y muchos otros no solo volverán a las calles de Managua, sino que serán más fuertes, como los cantos de vida y esperanza de Rubén Darío, el que siempre defendió la libertad, la justicia y la democracia.
Desde Panamá, sepan que no están solos.