La peligrosa travesía por la selva del Darién, que conecta a Panamá con Colombia, ha registrado una notable reducción del 40 % en el flujo de migrantes irregulares en lo que va de 2024, en comparación con el mismo período del año anterior.
Según datos del Servicio Nacional de Migración (SNM), hasta el momento han cruzado 296,411 personas, una cifra significativamente menor que los más de 520,000 migrantes registrados en 2023, reseñó EFE.
CAUSAS DE LA DISMINUCIÓN
Las autoridades atribuyen esta caída en los números a una combinación de factores. Entre ellos, destacan las medidas implementadas para cerrar trochas no autorizadas en la selva, el programa de repatriación en cooperación con Estados Unidos, y las difíciles condiciones climáticas de la temporada de lluvias, que complican el paso por la selva debido a ríos desbordados y caminos llenos de lodo.
“Esta reducción de 194,439 personas refleja un impacto significativo de las estrategias adoptadas por el Gobierno,” destacó el SNM en un comunicado.
VENEZOLANOS LIDERAN EL FLUJO MIGRATORIO
Entre los migrantes que cruzaron la frontera este año, los venezolanos representan la mayoría, sumando más de 196,000 personas hasta el 31 de octubre. Les siguen ciudadanos de países como Colombia, Ecuador y Haití, así como migrantes provenientes de África y Asia, quienes ven en el Darién una peligrosa pero necesaria vía para llegar a Norteamérica.
REACTIVACIÓN DEL PROGRAMA DE REPATRIACIÓN
Panamá y Estados Unidos firmaron un acuerdo en julio de este año, cuando el presidente José Raúl Mulino asumió su mandato, para repatriar migrantes que hayan ingresado por el Darién. Este programa, financiado con 6 millones de dólares por el gobierno estadounidense, ha permitido la deportación de más de mil personas, de las cuales 858 son colombianos.
El SNM informó que se han realizado 24 vuelos chárter bajo este convenio. Los últimos 26 ciudadanos colombianos fueron enviados de regreso a Medellín, Colombia, este miércoles. Sin embargo, los migrantes venezolanos no están incluidos en este programa debido a la suspensión de relaciones diplomáticas entre Panamá y Venezuela.
UN DESAFÍO HUMANITARIO Y DE SEGURIDAD
La selva del Darién sigue siendo una ruta peligrosa para miles de personas en busca de un futuro mejor. En 2023, más del 20 % de los migrantes eran menores de edad, lo que subraya el drama humanitario que se vive en la región. Panamá continúa trabajando en colaboración con otros países y organismos internacionales para manejar la crisis migratoria y proteger su seguridad fronteriza.