Con un arrastre de dos años de pandemia, en septiembre de 2022, el sistema educativo del país deberá medirse en la prueba del Programa para la Evaluación Internacional de los Alumnos (Pisa, por sus siglas en inglés).
Sobre este gran reto académico, el presidente de la República, Laurentino Cortizo, dijo estar seguro de que el país saldrá mal, una vez más en la prueba.
Cortizo señaló que la Educación es el gran reto de este Gobierno, los que vienen y que está dentro del pacto de bicentenario Cerrando Brechas.
“Los muchachos de nuestras escuelas públicas se las tiene que ver con los muchachos de las escuelas privadas y ya yo estoy cansado de que en todos esos exámenes internacionales nuestros estudiantes salgan mal. Vamos a ir con la prueba Pisa, que estoy seguro que también vamos a salir mal. En la prueba ERCE también salimos muy mal, pero vamos a hacer la Pisa porque eso nos sirve a nosotros de argumento. ¿Qué tenemos que estar escondiendo?”, expresó.
Las declaraciones del mandatario se dieron este viernes, 4 de marzo, durante una gira de trabajo en la provincia de Coclé.
Panamá, en la última prueba Pisa cuyos resultados fueron divulgados en 2019, ocupó el puesto 71 entre 79 países evaluados, solo por encima de Indonesia, Marruecos, Líbano, Kosovo, República Dominicana y Filipinas.
El país se situó muy por debajo de la zona media, tanto en lectura y comprensión de un texto escrito donde los más fuertes son Estonia y Canadá.
En matemáticas y ciencias, los estudiantes panameños que realizaron las pruebas fueron ubicados en el puesto 76 y 75, respectivamente, mientras que en lectura, el país ocupó la posición número 71.
Los resultados de Panamá se encuentran por debajo del promedio de los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), que es de 489 puntos, mientas que el país obtuvo 365 puntos.
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La prueba Pisa es una iniciativa de la OCDE, que mide la capacidad de los jóvenes de 15 años de edad para resolver problemas a partir de la aplicación de conocimientos de lectura, estudio de las matemáticas y ciencias naturales .
La evaluación, que se aplicó por primera vez en 2000, se ofrece cada tres años.