Con casa llena, la Junta Directiva de Corporación La Prensa (Corprensa) rindió su informe en la Asamblea General de Accionistas que se desarrolló la tarde de este lunes 6 de junio en el Hotel Hilton.
“La Prensa no se creó para ganar plata, sino para recuperar la democracia, y ahora defenderla”, expuso con vehemencia Diego Quijano, presidente de la Junta Directiva de Corprensa, y destacó que la empresa se mantiene sólida, y que las información de que está quebrada son “fake news” que deben desmentirse.
Reconoció que hay un plan de reestructuración para ajustarla a las necesidades actuales que la ha hecho más chica y al que hay que adaptarse. Otra aclaración que hizo es que los diarios La Prensa y Mi Diario se seguirán imprimiendo. Actualmente, Corprensa cuenta con 201 asociados.
Guillermo Champman Arias, vicepresidente y tesorero de la Junta Directiva, al hacer uso de la palabra pidió a los accionistas patriotas redoblar sus esfuerzos para salvar a Panamá, cuidando la democracia, la libertad y garantizando que haya una justicia real.
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En el curso de la Asamblea General los accionistas aprobaron las propuestas de reformas al pacto social para modernizar la empresa, y seguido ratificaron a los actuales directivos por periodos de uno y dos años.
Seguirán acompañando a Quijano y Chapman Arias en la Junta Directiva: Martizel Cruz (directiva), Min Chen (directiva), Aurelio Antonio Barría (directivo), Elizabeth Brannan Jaén de Berger (directiva), Horacio Icaza (directivo), Gina Faarup Cochez (directiva) y David Sucre Levy (directivo secretario).
El evento fue aprovechado para homenajear a César Tribaldos, quien por años integró la Junta Directiva de Corprensa ocupando diversos cargos en esa instancia, así como en la empresa periodística.
También hubo espacio para que los accionistas hicieran uso de la palabra y presentaran sus consideraciones diversas, la inmensa mayoría en respaldo al trabajo y compromiso de La Prensa y Mi Diario con la libertad de expresión e información, así como con la democracia.
No faltaron voces disonantes, como la de la diputada Mayín Correa, quien acudió facultada por el expresidente Ricardo Martinelli (accionista de Corprensa) y acusó a La Prensa de destruir a la familia Martinelli Linares al dedicarle varias portadas.
Sus declaraciones fueron refutadas por otros accionistas que al hacer uso de la palabra dijeron que “La Prensa no está para defender ladrones”.
Igualmente mostraron su orgullo por el rol que esta empresa periodística ha tenido frente a temas de corrupción y necesidad de transparencia que muy pocos abordan.