Más de 400 obreros que participaron en la protesta de avenida Balboa permanecen detenidos en la sede de la Policía Nacional, tras los enfrentamientos registrados en el edificio en construcción del Hospital del Niño. Sus familiares, desesperados por información, se mantienen en las afueras del recinto policial, sin tener claro el futuro legal de sus seres queridos ni las condiciones en las que están.
Se espera que este jueves inicien las audiencias de control de garantías, donde un juez determinará si las aprehensiones son legales, los posibles cargos y si habrá medidas cautelares. Mientras tanto, las familias aseguran que no han recibido orientación oficial sobre si deben llevar alimentos, ropa o artículos de aseo para los detenidos.
Las pérdidas materiales por los disturbios se calculan en 267 mil dólares. La Defensoría del Pueblo informó que ya proporcionaron alimento a los aprehendidos y que revisarán su situación dentro del lugar de detención.
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