Es un hecho que la juez de garantía Clara Montenegro puso en jaque a Rubén De León, exdiputado quien tras una advertencia debía acudir al Sistema Penal Acusatorio, sino aplicarían una orden de conducción. El exdiputado se acercó a la sala de audiencia por el caso del manejo irregular de las planillas de la Asamblea.
Fue exactamente el 9 de agosto, cuando toda la ciudadanía estaba atenta al juicio de Ricardo Martinelli, cuando el Primer Tribunal Superior acogió un amparo de garantías constitucionales que declina su caso a la Corte.
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El fallo tiene fecha de 9 de agosto y explica que De León es diputado del Parlacen y por ende debe ser investigado por la Corte, pues ya hay una notificación del Tribunal Electoral que es diputado desde el pasado 4 de mayo hasta el 2024.
Sin embargo, la misma suerte no la corrió el exalcalde de Los Santos Eudocio Pany Pérez a quien le rechazaron la solicitud, pues solo presentó una nota de prensa de la Junta Nacional de Escrutinio de que era uno de los 20 diputados al Parlacen.
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En el caso de las planillas de la Asamblea está imputada Rubiela Pitano, exdirectora de Senadis (renunció) por la presunta comisión del delito contra la fe pública, ya que a través de dos cheques que sumaban 15 mil dólares fueron a parar a su cuenta bancaria, según la fiscal Zuleyka Moore. La acusada tiene medida de reporte cada 20 de cada mes e impedimento de salida del país.
La Fiscalía puede apelar la decisión y han sostenido que la formalidad para que De León sea diputado del Parlacen no se ha cumplido y debe hacerlo personalmente ante la sede del organismo, ubicada en Guatemala.