En el marco de la Asamblea General de las Naciones Unidas se desarrollaron una serie de reuniones para atender la crisis de Venezuela. En este sentido, la delegación panameña participó activamente en las reuniones del Grupo de Lima, del Grupo Internacional de Contacto y del Órgano de Consulta para la Aplicación del TIAR, de la OEA.
La posición de Panamá en torno a la crisis venezolana es la de exigir el respeto a los Derechos Humanos y apoyar la búsqueda de una solución pacífica y democrática a través del diálogo y de elecciones transparentes. Panamá, también apoya los esfuerzos de cooperación regional para investigar y combatir las actividades de lavado de activos, tráfico de drogas y demás actividades ilícitas. Finalmente, reitera que una intervención militar no es la forma adecuada para la solución de esta grave crisis.
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En cuanto a la Reunión del Grupo de Lima, se eligió a Panamá como uno de los países que representarán al Grupo en el esfuerzo por acercar, tanto al Grupo de Contacto, como a otras instancias internacionales que logren solidarizar un mayor número de países con la actual crisis humanitaria que se vive en Venezuela. La administración del presidente Laurentino Cortizo Cohen, ha procurado precisamente, que haya una convergencia entre los diferentes grupos que buscan una solución a esta crisis.
En dicha resolución, Panamá y los otros países manifestaron su rechazo a la candidatura del régimen de Venezuela, al Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas.
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Por otro lado, Panamá fue bienvenida a su primera reunión como miembro formal del Grupo de Contacto, el cual incluye a los países de la Unión Europea. Panamá apoyó una declaración que hiciese un llamado a una solución pacífica y democrática, a través de elecciones creíbles y transparentes. “Una hoja de ruta para una transición negociada, para retornar a la democracia, con elecciones transparentes y fiscalizadas es imperante e inaplazable”, señaló la viceministra Mouynes.
Durante el Órgano de Consulta, Panamá apoyó la decisión de investigar actividades ilícitas, lavado de activos y tráfico ilegal de drogas y a redes transnacionales de delincuencia organizada que pudieran estar relacionadas con personas del régimen venezolano, dentro del marco de lo establecido en nuestra legislación nacional.
Finalmente, Panamá, de manera consistente con su posición ya expresada en reuniones anteriores, dejó constancia de estar a favor de evaluar medidas tendientes a solucionar la crisis que atraviesa Venezuela, siempre y cuando éstas no conlleven una intervención militar.