El mal tiempo sigue azotando a Panamá, dejando un saldo preocupante de más de cinco mil personas afectadas por lluvias y fuertes vientos. Según reportes del Centro de Operaciones de Emergencia Nacional (COEN) del Sistema Nacional de Protección Civil (Sinaproc), el país se encuentra bajo Alertas Amarilla y Verde debido a inundaciones, deslizamientos de tierra y árboles caídos que han generado múltiples emergencias.
Refugios habilitados y cifras alarmantes
Para proteger a las familias más vulnerables, se han habilitado 17 albergues distribuidos en provincias como Veraguas, Chiriquí y la Comarca Ngäbe Buglé. Hasta el momento, 678 personas han sido alojadas en estos refugios tras perder sus hogares o estar en peligro.
El COEN también ha registrado 199 deslizamientos de tierra, siendo Veraguas y Chiriquí las regiones más afectadas. Además, se han reportado 80 inundaciones en provincias como Los Santos, Darién y Panamá Oeste, dejando comunidades enteras en estado de emergencia.
📣Aviso de Advertencia N°2 por lluvias intermitentes de variada intensidad. Precaución por saturación de los suelos en sectores ya afectados tendientes a sufrir de inundaciones, desborde de ríos y deslizamientos de tierra.⛈️ @Sinaproc_Panama @MinGobPma @BCBRP @MeducaPma @MIDAPma pic.twitter.com/DdS15QXpPd
— IMHPA (@imhpapma) November 11, 2024
Educación y seguridad en riesgo
Las fuertes lluvias también han golpeado la infraestructura educativa. Varias escuelas, como Llano Cartí en Panamá y Ernestina Chiari en Herrera, han sufrido daños significativos, desde filtraciones hasta desprendimientos de techo e inundaciones.
Lamentablemente, la crisis ha cobrado la vida de siete personas, cinco por inmersión en ríos y deslizamientos, y dos en un accidente de tránsito en Chiriquí.
Acciones inmediatas
En las últimas 12 horas, se han intensificado las labores de remoción de árboles y escombros en zonas críticas como Chiriquí y Veraguas. Sinaproc hace un llamado urgente a las familias en áreas vulnerables para que sigan las recomendaciones de seguridad y evacúen cuando sea necesario.
El país se encuentra en alerta, y las autoridades continúan trabajando para mitigar los efectos de este fenómeno climático que ha puesto a prueba la resiliencia de los panameños.