Un plan para que los senderos existentes en el país, ya sea terrestres o acuáticos, cuenten con la mejor infraestructura para que los visitantes los puedan disfrutar ya está en ejecución y se trata del proyecto “1000 Kilómetros de Senderos”.
“Es una evolución del trabajo que se venía haciendo a través de la Fundación Caminando Panamá, rehabilitando circuitos de senderos”, explica Adrián Benedetti, coordinador del proyecto.
¿EN QUÉ CONSISTE?
Según Benedetti, el proyecto consiste en rehabilitar 1000 km de senderos terrestres y acuáticos en todo el país en los próximos cinco años. “Cuando decimos rehabilitar quiere decir que un sendero cuente con la infraestructura adecuada para la experiencia que puede brindar. Además, es importante que se cuente con un plan para mantenerlo”, dijo.
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“Por eso es que trabajamos con grupos locales para crear ‘Comités de Senderos’, que juntos los mantengan en buen estado para el beneficio de los guías y servicios de turismo locales que dependen del visitante para generar ingresos”, acotó.
¿CÓMO SURGIÓ?
“Conversando con un amigo surgió la idea de armar un proyecto nacional con una meta clara. Me reuní con el ministro de Turismo, Iván Eskildsen, y le pareció que el proyecto encajaba perfectamente con el Plan Maestro Sostenible de Turismo 2020-2025, que tiene un enfoque en impulsar el turismo de aventura y comunitario. El ministro Eskildsen habló con el ministro de Ambiente, Milciades Concepción, y él también vio que el proyecto se alineaba con el Plan de Acción de Turismo en Áreas Protegidas”, detalló.
El proyecto apenas lleva un año y está en su primera etapa para implementar proyectos pilotos para tener ejemplos de éxito e ir sumando socios y estableciendo acuerdos para entrar a la segunda etapa de obtener más información sobre los senderos en todos el país. “Diría que tiene tres etapas: introducción (en que estamos ahora), expansión nacional (que iniciaremos en la segunda mitad del 2022 e inicios de 2023, con la meta de tener un inventario nacional de todos los senderos) e implementación nacional (2023 -2025)”, destacó.
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Para el consultor en temas de áreas protegidas, conservación de biodiversidad y desarrollo comunitario, el trabajo no es fácil, pues hay que levantar mucha información de cada sendero. “Es indispensable contar con el consenso de las comunidades locales para sensibilizarles sobre este proyecto y también sobre cómo quieren manejar a turistas. Y si el sendero está dentro de un Parque Nacional se debe trabajar muy de cerca con MiAmbiente. Otro punto inherente a este proyecto son los fondos para mejorarlos y finalmente llegar a acuerdos con los grupos locales para que apoyen en realizar el mantenimiento. Hasta ahora estamos trabajando en proyectos que para fin del 2022 deben resultar en 100 - 150 km de senderos”, indicó.
El plan es coordinado desde la Autoridad de Turismo de Panamá, pero implementado en conjunto con el Ministerio de Ambiente. “Dependiendo del proyecto pueden estar involucrados diferentes grupos locales”, explicó.
Benedetti dice anhelar que el proyecto evolucione a ser manejado por una asociación público-privado. “Pero eso solo se logrará demostrando resultados con los proyectos pilotos y generando datos que respalden que invertir en turismo de aventura en la naturaleza es una inversión importante para Panamá”.
DATOS
El plan es coordinado desde la Autoridad de Turismo, pero implementado con MiAmbiente.
Ya se ha estado trabajando en la región canalera, Taboga, Chame, Campana, El Valle, las tierras altas chiricanas y la isla Bastimentos, en Bocas del Toro.
Pueden estar involucrados diferentes grupos locales, así como municipios, fundaciones y empresas privadas
