La vicepresidenta de Estados Unidos y candidata demócrata a la Casa Blanca, Kamala Harris, defendió la prohibición de los rifles de asalto durante un evento de campaña conducido por Oprah Winfrey. En este contexto, admitió que posee un arma y comentó entre risas: “Si alguien irrumpe en mi casa, recibirá un disparo”, aunque luego añadió que probablemente no debería haber dicho eso.
Harris abogó por una regulación más estricta sobre las armas, enfatizando que los rifles de asalto son responsables de la mayoría de los tiroteos masivos en el país. Además, durante el evento, también defendió el acceso al aborto y propuso una reforma migratoria que aumente los recursos para la Patrulla Fronteriza.
Por otro lado, el presidente Joe Biden, en la gala anual del Caucus Hispano del Congreso, destacó que los inmigrantes son “la sangre de Estados Unidos” y criticó las afirmaciones de que estos están perjudicando al país. Biden subrayó que su administración ha realizado inversiones significativas en la comunidad latina y que aún queda trabajo por hacer en la reforma migratoria.
