El presidente Joe Biden, quien dejará el cargo la próxima semana, anunció que conmutará las penas de casi 2 mil 500 personas condenadas por delitos no violentos relacionados con las drogas. Esta medida se basa en la consideración de que muchos de estos individuos cumplen condenas desproporcionadamente largas en comparación con las sentencias actuales, según un comunicado de la Casa Blanca.
Biden ha destacado que esta acción es parte de su esfuerzo por abordar las disparidades en las sentencias y proporcionar segundas oportunidades a quienes han demostrado rehabilitación. La decisión también se enmarca en un contexto más amplio, donde Biden ha concedido más indultos y conmutaciones que cualquier otro presidente en un periodo similar de su mandato. En diciembre, Biden ya había conmutado las penas de 37 prisioneros condenados a muerte, transformando sus sentencias a cadena perpetua sin libertad condicional.
Sin embargo, la decisión ha generado críticas, especialmente por el indulto otorgado a su hijo Hunter Biden, quien se declaró culpable de delitos fiscales y cargos relacionados con armas. Este indulto ha sido objeto de controversia y ha suscitado reacciones tanto dentro del Partido Demócrata como del Partido Republicano.
Los abogados defensores y grupos de derechos civiles han intensificado sus esfuerzos para resaltar casos de personas que consideran han sido condenadas injustamente o que están cumpliendo penas excesivas por delitos no violentos.