En Alabama (Estados Unidos) acusó de homicidio involuntario de su feto a una mujer que sufrió un aborto al recibir un disparo en el estómago, aunque los fiscales dijeron este viernes que aún no han decidido si la llevarán a juicio.
La mujer en cuestión, Marshae Jones, de 27 años, participó el año pasado en una pelea que terminó con otra mujer, Ebony Jemison, de 23 años, disparándole en el estómago y causando la muerte de su feto de cinco meses. Las dos mujeres son afroamericanas.
Las autoridades que investigaron la pelea concluyeron que Jemison actuó en defensa propia y que Jones inició la trifulca.
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Esta semana, de acuerdo con esa conclusión, Jones fue acusada por un gran jurado de homicidio involuntario al considerar que fue ella quien provocó la muerte de su bebé nonata. El gran jurado no acusó a Jemison, autora del disparo, de ningún delito.
En la acusación, el gran jurado dijo que Jones “intencionalmente” causó la muerte de su feto al “iniciar una pelea sabiendo que estaba embarazada de cinco meses”.
Las autoridades detuvieron el miércoles a Jones, que el jueves quedó en libertad bajo fianza de 50 mil dólares.
Ante el gran revuelo generado en el país por el caso en Alabama, ya de por sí en el foco por ser el estado con las leyes antiaborto más estrictas de Estados Unidos,los fiscales del condado afirmaron hoy que aún no han decidido si llevarán a Jones a juicio.
Aunque el gran jurado ha dado su opinión, nuestra oficina está en proceso de evaluar el caso y aún no ha tomado una decisión sobre si procesarlo como homicidio involuntario, reducirlo a un delito menor o no procesarlo", dijo en un comunicado la fiscal Lynneice Washington.
El hecho de que esta tragedia era 100 % evitable hace que este caso sea aún más desalentador", añadieron los fiscales.
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La firma de abogados que representa a Jones, White Arnold & Dowd, publicó un comunicado en el que afirmó que su clienta enfrenta un proceso "sin precedentes" que puede resultar en una "injusticia".
Esta joven madre recibió un disparo en el estómago estando embarazada de cinco meses y como consecuencia de ello perdió a su bebé. Ahora, por razones que desafían la imaginación, enfrenta un proceso legal sin precedentes que somete a esta víctima de violencia a más angustia y dolor", dijo.
De ser juzgada y condenada, Jones podría recibir hasta 20 años de cárcel.