El presidente francés, Emmanuel Macron, se reunió con Volodímir Zelenski en París y anunció un nuevo paquete de ayuda militar a Ucrania por 2 mil millones de euros, además de reiterar su apoyo a un alto el fuego que conduzca a una paz duradera. Macron enfatizó que Rusia no tendrá injerencia en el apoyo europeo a Kiev ni en las futuras fuerzas de paz, que se desplegarían sin tropas europeas en primera línea, sino en roles de entrenamiento y control estratégico.
Mientras tanto, ambos bandos se acusaron mutuamente de violar el alto el fuego sobre ataques a infraestructuras energéticas. Rusia denunció ataques ucranianos en Crimea y regiones fronterizas, mientras Ucrania calificó las acusaciones de “propaganda mentirosa” y señaló que Moscú ha bombardeado sus instalaciones en ocho ocasiones desde el 18 de marzo.
Zelenski solicitó que EE.UU. insista en negociaciones incondicionales y que se mantengan las sanciones a Rusia mientras ocupe territorio ucraniano. Las conversaciones en Arabia Saudí para un acuerdo en el mar Negro enfrentan obstáculos, como la exigencia rusa de levantar sanciones agrícolas occidentales.