El fundador de WikiLeaks, que considera haber sido “un preso político” porque EE. UU. lo acusó de 18 cargos por delitos de espionaje e intrusión informática, ha asegurado este martes en una intervención en el Consejo de Europa que si está libre es porque se declaró “culpable de haber hecho periodismo”.
“Quiero ser totalmente claro: no soy libre porque haya funcionado el sistema. Soy libre porque me he declarado culpable de haber hecho periodismo”, ha recalcado Assange, que este martes ha roto su silencio tras salir en junio de una cárcel de máxima seguridad en Reino Unido.
La puesta en libertad de Assange ha sido posible tras un acuerdo con el Departamento de Justicia de EE. UU. en el que se declaró culpable de violar dicha ley de espionaje, lo que suponía una condena de 62 meses de cárcel que quedó anulada por el tiempo ya cumplido en Belmarsh, a cambio de poder regresar a Australia.
Assange se hizo famoso en 2010 tras filtrar cientos de miles de documentos secretos o de contenido sensible que revelaron los secretos en EE. UU. de las guerras de Irak y Afganistán.
Está previsto que este miércoles la Asamblea del Consejo de Europa vote una resolución cuyo borrador considera a Assange un “preso político”. Ese precisamente es uno de los motivos que le llevó a aceptar la “invitación de naturaleza excepcional” del Consejo de Europa.
El texto, que ha escrito la islandesa Thórhildur Sunna Aevarsdóttir, alerta también del “efecto disuasorio” que su detención ha podido tener en la profesión periodística.